El régimen de Nicolás Maduro vuelve a coaccionar al pueblo venezolano, esta vez bajo la amenaza de despido a quien no asista a las próximas elecciones parlamentarias. La intimidación llegó esta vez de parte de Iris Varela, candidata del Partido Socialista Unidos de Venezuela y hasta hace unos meses ministra de Servicios Penitenciarios, según informó el medio argentino Infobae.
"Yo le voy a decir a toda la gente que trabaja en el ministerio penitenciario, ¡el que no vote, que lo boten! Porque no tiene sentido que nosotros arriesguemos lo que nos estamos jugando el próximo domingo", expresó públicamente Varela.
Preocupado por una pobre participación en los comicios del 6 de diciembre, el régimen chavista ha iniciado una serie de amenazas sobre la población venezolana y también de ofensas sobre figuras internacionales que no se pronuncien a favor de la "legitimidad" de sus elecciones, como el presidente argentino Alberto Fernández.
"El que no vota no come. Para el que no vote, no hay comida", dijo también este lunes Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela. La coacción responde al reciente allanamiento por parte de las fuerzas de régimen de la sede de Alimenta la Solidaridad, una entidad benéfica que garantiza ayuda vital y alimentos a decenas de miles de niños venezolanos en situaciones de extrema pobreza. Las cuentas de Alimenta la Solidaridad también fueron congeladas por las instituciones de la dictadura venezolana.
Las próximas elecciones parlamentarias en Venezuela no contarán con la aceptación de la comunidad internacional debido a la intimidación a la que ha sometido el régimen a los votantes y al resto de los partidos políticos no aliados al chavismo. Todas estas acciones antidemocráticas aseguran el triunfo de las fuerzas de la dictadura y la permanencia en el poder de Nicolás Maduro, quien prometió en el cierre de campaña de ayer que se iría del Palacio de Miraflores si su partido perdía en los comicios.
