Los bares de Florida, con la excepción de Miami-Dade, Broward y Palm Beach, reabrieron sus puertas hace apenas tres semanas tras permanecer clausurados debido a la pandemia del Covid-19, pero una nueva orden del Gobierno estatal suspendió la venta de bebidas alcohólicas, dadas las altas cifras de nuevos casos de coronavirus.
El anuncio fue realizado por el secretario estatal del Departmento de Negocios y Regulación Profesional, Halsey Beshears, y tiene vigencia inmediata, según subrayó.
Hace apenas 24 horas el gobernador Ron DeSantis anunció que suspendería los permisos de venta de alcohol si no se cumplía las normas sanitarias establecidas, reportó Diario Las Américas.
"Si se trata de un lugar que se convierte en un caos, como si fuera una de esas fiestas abarrotadas, eso no está bien. No es un error menor", señaló DeSantis.
El gobernador acentuó que no daría paso atrás a la reapertura de la economía y por ello decidió suspender la venta de bebidas alcohólicas en bares, aunque lógicamente eso signifique el cese de actividades.
Hace tan solo una semana un grupo de 16 jóvenes amigos en Jacksonville, en el noreste de Florida, dieron positivo por coronavirus días después de haber celebrado el cumpleaños de uno de ellos en un bar, que reabrió sus puertas como parte del plan de reapertura del Estado.
El viernes 26 de junio Florida reportó 8.942 nuevos casos de coronavirus, 3.938 más que el día anterior, lo que significó la peor cifra de contagios reportada allí hasta la fecha.
Hasta el momento Florida suma 122.960 casos desde que comenzó la pandemia en marzo y 3.366 fallecidos, incluyendo 39 en las últimas 24 horas, 46 el jueves, 44 el miércoles y 64 el martes.
Por otra parte, el condado Miami-Dade, donde se encuentra la ciudad de Miami, reportó 1.532 nuevos casos, la cifra más alta reportada hasta el momento, lo que eleva la cifra total allí a 30.196 contagios.