El Gobierno y el Ministerio de Asuntos Exteriores españoles ejercieron una intensa labor diplomática para que ningún jefe de Gobierno o de Estado europeo se reuniera con el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, durante su gira por esa región, aseguró el diario español ABC.
El propósito del Gobierno de Pedro Sánchez, a juzgar por fuentes consultadas por esa publicación en Madrid, Washington, París y Caracas, era que Guaidó fuera recibido solamente por los ministros de Exteriores de esas naciones.
Especialmente intensas fueron las presiones hechas por La Moncloa en París, concretamente en el Elíseo y en el entorno del presidente Macron, aseguraron las fuentes, que ABC no reveló. Hubo también, no obstante, una eficaz actividad del entorno de Guaidó para contrarrestar esas presiones, indicó.
"El jueves 23 de enero Juan Guaidó está en Davos. En ese momento aparecen dudas en Francia sobre si es conveniente que al presidente encargado le reciba el presidente o el ministro de Exteriores", aseguró una de las fuentes.
La imagen difundida de Macron y Guaidó no fue la habitual foto oficial distribuida por el Elíseo ni figuró en la agenda que esta sede de Gobierno envía a los medios. "Esas dudas las instiga el Gobierno de España y se plantean no en los escalafones más altos, sino en puntos intermedios, con funcionarios que precisamente se dedican a esta logística, gente que no está en la primera fila. No es algo definitivo, pero se pone como ejemplo que en España, un país en que Venezuela es tan importante, el presidente del Gobierno no le vea", explicó la propia fuente, en referencia a la negativa de Sánchez a recibir al opositor venezolano.
Sin embargo, según otras fuentes cercanas a Guaidó, en realidad había un gran interés por parte de Macron para verse con el presidente encargado, aconsejado por la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro británico, Boris Johnson, que estaban a favor de esta gira.
"Finalmente, el propio Macron aclara que es él quien tiene interés en verse con Guaidó, y quien decide verle, aun cuando Sánchez, con quien tiene contacto, no haya aclarado en ese momento si va a recibirle o no", agregó una de las fuentes.
Juan Guaidó fue recibido por Boris Johnson, por Josep Borrell, Alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, por Angela Merkel, Emmanuel Macron, por Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, y finalizó en EEUU, donde fue homenajeado por Donald Trump en el Capitolio en el Discurso del Estado de la Unión el 4 de febrero, cuando recibió una calurosa y prolongada ovación.
Solo en España no fue recibido por el jefe del Gobierno, pues en Madrid lo atendió la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, quien no lo recibió en ninguna sede de Gobierno, sino en la Casa América de la capital española.
ABC se puso en contacto con el Elíseo para recabar su versión sobre el encuentro Macron-Guaidó y la agregada de prensa de la Direccion General de Comunicación del Elíseo respondió: "Lamento comunicarle que no aportaremos ningún comentario al respecto".
Puestos en contacto con La Moncloa, las autoridades del Gobierno español no hicieron ningún comentario al respecto y se limitaron a trasladar la cuestión al Ministerio de Exteriores.
Guaidó comenzó su gira internacional el pasado 20 de enero en Colombia, donde participó en la Cumbre Hemisférica contra el Terrorismo. Allí se reunió, entre otros mandatarios, con el presidente colombiano, Iván Duque, y con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo.
Pocas horas antes de esos encuentros en Bogotá, Delcy Rodríguez, vicepresidenta del Gobierno de Nicolás Maduro, aterrizó en el aeropuerto de Madrid-Barajas para reunirse durante más de una hora con el secretario de Organización del PSOE y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y hablar por teléfono con el presidente, Pedro Sánchez. Esto último, negado por el propio Sánchez.
Según ABC, Rodríguez pidió que el presidente del Gobierno español no recibiera a Juan Guaidó y que lo hiciera solamente la ministra de Exteriores; manifestó su malestar por la presencia del líder opositor Leopoldo López en la residencia del embajador español en Caracas; y por último, hablaron de la presencia de Repsol en Venezuela.
"Pocas horas después de que Delcy Rodríguez abandonara España, cuando Juan Guaidó se encontraba todavía en Colombia, empezaron las presiones en varios de los países que iba a visitar el presidente encargado, especialmente Francia y Alemania, para que Emmanuel Macron y Angela Merkel no lo recibieran", explicaron fuentes de ABC en Caracas.
"Puede ser coincidencia o no, pero muchos en el entorno del presidente encargado pensamos que fue otro de los asuntos que abordó Delcy Rodríguez con sus interlocutores españoles", advirtió la fuente.
Ya venezuela es colonia de cuba. Poquisimas ocasiones en la historia una nacion pequeña, miserable y sin recursos manda sobre otra llena de riquezas naturales y una poblacion que la triplica. España, otrora metropoli de cuba, va camino a invertir los papeles y ser tan colonia como venezuela.
Admira y desasosiega ver todo lo que logra un buen aparato de inteligencia y penetracion. Lo unico que hizo bien fidel.
Lo que ocurre que la Cadena Meliá impone un poder de lobby muy fuerte al gobierno español, y tiene buena parte de sus intereses en Cuba, que es quien domina Venezuela. Y no dudemos que la inteligencia cubana haya sostenido el intento de desacreditar en Europa a Juan Guaidó, de todas las formas posibles.
El mal llamado gobierno español es en si un departamento de la inteligencia cubana. Pablo Iglesias es un agenton financiado por Maduro por ordenes de la Habana. Y el Pedro Sanchez un alumno destacado del agente Zapatero.
Ya el duo Sanchez-Pablo esta buscando lios con los yankees. Luego les echaran la culpa de todo lo que pase en españa. Al tiempo.
La viejisima madre patria (bisabuela) haciendo eco a sus bisnietos socialistas.