La Administracion de Donald Trump anunció una medida que busca endurecer los requisitos de trabajo de quienes pueden acceder al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), lo que podría dejar fuera del beneficio de los cupones de alimentos a cientos de miles de ciudadanos de EEUU.
La medida, anunciada por el Departamento de Agricultura el miércoles, forma parte del esfuerzo sostenido del Gobierno por limitar el acceso al beneficio federal de los ciudadanos, reportó el canal Univision.
Los republicanos lo han catalogado como un "requerimiento de trabajo", pero en la práctica la medida excluirá a 688.000 estadounidenses para 2021, según estimaciones del propio organismo federal.
La nueva regla, que regirá desde abril de 2020, endurecerá los requisitos para aquellos adultos sin dependientes ni discapacidades, cerca del 7% de las personas inscritas, calcula el Gobierno.
"Con esto buscamos restituir la intención original de los cupones de alimento... llevando a los estadounidenses sin discapacidades a que sean autosuficientes", dijo el secretario de Agricultura Sonny Perdue.
"La tasa de desempleo es de 3.6%, la más baja en 50 años", prosiguió Sonny. "Hay más trabajos abiertos para que la gente pueda aplicar", agregó.
En el año 2000, el desempleo fue del 4%. Para entonces, los beneficiarios de cupones de alimentos llegaron a las 17 millones de personas. En 2019, el número de beneficiarios alcanzó los 36 millones.
Brandon Lipps, el subsecretario del Departamento de Agricultura para nutrición y servicios del consumidor, dijo a los reporteros que la nueva regla no afectará a niños, padres o aquellos mayores de 50 años; tampoco a personas con discapacidad o mujeres embarazadas.
El cambio es el primero que el Gobierno de Donald Trump planea hacer al programa de cupones de alimentación, a pesar de que el Congreso rechazó recortes al plan en 2018. De implementarse las tres medidas proyectadas, más de tres millones de personas podrían quedar despojadas de sus beneficios.
Lisa Davis, vicepresidenta de la organización Share Our Strength, que promueve programas para acabar con el hambre en la niñez, criticó en declaraciones al diario The Washington Post que pese a la oposición del Congreso continuaran los esfuerzos por excluir a los beneficiarios de ayudas contra el hambre.
"Es profundamente decepcionante que a pesar de la abrumadora oposición a la propuesta, la Casa Blanca haya culminado la regla que endurece los requisitos de trabajo para millones de participantes del SNAP, lo que hará que cientos de miles pierdan sus beneficios", dijo.
"La política debe ser un incentivo, no un castigo", advirtió monseñor Kevin Sullivan, director ejecutivo de Caridades Católicas en la Arquidiócesis de Nueva York.
Anteriormente, la Administración Trump había hecho recortes en el gasto destinado a alimentos para los migrantes, en atención médica y en las condiciones de los centros de detención, entre otras medidas propuestas por la consultora McKinsey & Company, contratada como asesora para esos fines.
De acuerdo con una investigación conjunta del diario The New York Times y ProPublica, quienes tuvieron acceso a los informes tras una investigación conjunta, lograda después de una batalla legal para acceder a los informes de la Oficina de Fronteras y Migración, (ICE, por sus siglas en inglés), la consultora también propuso fórmulas para acelerar el proceso de deportación y el de contratación de personal para ICE.
El plan de acción de McKinsey mostró "beneficios cuantificables", dijeron funcionarios de ICE en un documento de contratación de octubre de 2017, "incluyendo el aumento de las deportaciones totales y las reducciones de tiempo para expulsar a un detenido".
En junio de este año, el Departamento de Estado publicó un informe sobre las condiciones de las instalaciones que albergan a los migrantes y alertó sobre los problemas de salubridad en todos los niveles de los centros de detención, como los alimentos en mal estado y los baños deteriorados.
Miles de cubanos que están recluidos en los centros de detención de ICE han denunciado las condiciones de hacinamiento que padecen, así como la incertibumbre legal en que permanecen encerrados con la esperanza de ser aceptados en EEUU.
En mi ultima visita a Miami me llamó mucho la atención que el programa de "Food Stamps" tuviera una campaña publicitaria por Televisión donde anunciaba el Programa e invitaba a las personas a que lo utilizaran. ¿Que? ¿Sobran sellos de alimentos gratis? Me estaba quedando en la zona de Kendall que es una zona de clase media y de blancos. Me quede asombrado de la cantidad de personas que pagaban con los sellos de comida y después los veía en el parking con su carro del supermercado metiendo los productos en el maletero. Todos tenían buenos automóviles y hasta del año . Si una escena similar la hubiera visto en Overtown (el barrio de los negros ) hubiese tenido lógica, pero no en Kendall.
El programa de Food Stamps es uno de los métodos que utiliza el Partido Demócrata para "comprar votos". Y hay personas que por unos sellitos serian hasta capaces de vender su voto.
Al final el mercado sube los precios y la mayoría de los ciudadanos que son los que pagan el programa lo sufren.