La estatua de 600 kilos y 2,28 metros de altura del fallecido presidente argentino Néstor Kirchner, que distinguía a la suntuosa sede de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), ahora está en una bodega como parte del proceso promovido por Ecuador para recuperar las instalaciones del organismo que funcionó en Quito.
El 26 de septiembre, diversos medios de prensa de Ecuador confirmaron el traslado a una bodega de la estatua de Kirchner, junto a papeles, documentos y muebles que pertenecen a UNASUR, hasta que algún país del casi extinto bloque los reclame. Una semana antes, la Asamblea Nacional ecuatoriana le dio potestad al Gobierno de Lenin Moreno para retirarse de UNASUR.
El organismo surgió en 2008 con la firma de su tratado constitutivo. Tuvo un claro impulso de Argentina (Kirchner), Brasil (Lula da Silva), Ecuador (Rafael Correa) y Venezuela (Hugo Chávez). En su mejor momento estuvo formado por 12 naciones sudamericanas y Néstor Kirchner fue su primer secretario general, para el período 2010-2012, pero falleció poco después.
El edificio de UNASUR en Quito fue construido por el Estado ecuatoriano y fue inaugurado en 2014. Está valorado en 40 millones de dólares y en su momento fue bautizado como Néstor Kirchner. Ecuador decidió no solo retirarse del bloque sino recuperar el inmueble. Se ha anunciado la creación de una universidad indígena que funcionará en el edificio.
En abril de 2018, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú decidieron suspender su participación en UNASUR debido a la falta de "resultados concretos que garanticen el funcionamiento adecuado de la organización". Solo cuatro naciones permanecen en el bloque: Bolivia, Venezuela, Uruguay, Guyana y Surinam.
La estatua de Néstor Kirchner está avaluada por 114.000 dólares y fue donada a UNASUR por el Gobierno de Argentina, presidido en el 2014 por Cristina Fernández de Kirchner.
El escultor que realizó la obra es Miguel Gerónimo Villalba. La estatua se hizo en Buenos Aires y luego se trasladó a Quito. Cuando fue develada, en 2014, el escultor dijo al diario La Nación: "lo realicé en movimiento, como avanzando. Intenté transmitir ese concepto. Quise recordar el día en el que fue a la ESMA (centro militar de torturas) y pidió bajar los cuadros (de los dictadores Jorge Videla y Reynaldo Bignone). De allí el gesto de levantar la mano".
"Nuestro país tiene una historia muy rica en hombres y mujeres valientes, que nos enorgullecen día a día. Por eso, no podemos permitir que se rinda homenaje a un personaje tan cuestionado como Néstor Kirchner", manifestó en agosto del año pasado el legislador Byron Suquilanda. En aquel momento ya el Parlamento de ese país andino había votado a favor de que se retirara la estatua de Kirchner de suelo ecuatoriano.
El edificio de UNASUR, si bien fue soñado por Kirchner y Correa, en realidad lo ocupó el expresidente colombiano Ernesto Samper, quien fue secretario general de la UNASUR entre 2014 y 2017.
Una vez que Samper concluyó su mandato de tres años, en 2017, el organismo quedó acéfalo y, dada la crisis económica en Venezuela, perdió también una de sus principales fuentes de financiamiento.
Quizás en un scrap metal puedan hacerle un billetico.
Y así harán con los carteles con la imagen de Castro I y Castro II, diciendo boberías...