El prisionero político cubano Pablo Moya Delá, miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), fue excarcelado esta semana por su mal estado de salud tras permanecer en prisión desde octubre del 2020, informó su hijo en las redes sociales.
Moya Delá fue detenido en La Habana por protestar de manera pacífica contra el reparto arbitrario de multas, así como por la falta de suministros de alimentos básicos, sin embargo, fue condenado a tres años de prisión por el presunto delito de "evasión de impuestos".
A pesar de que fue arrestado en La Habana, el opositor fue llevado inicialmente a la prisión de Aguadores en Santiago de Cuba, y dos meses después fue enviado al centro penitenciario conocido como Boniato con el presunto objetivo de ofrecerle mejor atención medica debido a sus problemas de salud.
"Ni atención médica ni especialistas encontró en este cruel camino, sólo verdugos al servicio del régimen", denunció Daineris Moya, su hijo. Su padre, según explicó, padece de hipertensión arterial, arritmia cardíaca y atrofia muscular en una de sus manos debido a un trastorno neurológico.
"Mientras yo publicaba sobre los maltratos físicos y psicológicos, además de la falta de atención médica, el jefe de la prisión de Boniato me comunicaba vía telefónica que esto no era cierto", continuó.
"Cuando mi tía, hermana de mi padre y yo le dijimos que mi padre se encontraba en huelga de hambre porque fue agredido, dónde resultó ser lesionando, este señor que se identificó como el jefe, negándose a revelar su nombre, nos dijo que eso era un montaje, que nada de eso estaba sucediendo con mi padre", añadió.
El pasado mes de noviembre Moya Delá, a quien una organización alemana le dedicó una serie de sellos por su condición de preso político, se infectó de Covid-19 en el penal de Boniato, en Santiago de Cuba.
"El preso político y el que además es mi padre Pablo Moya Delá es uno de los varios presos que en estos momentos se encuentran atravesando una dura y difícil situación, ya que han dado positivo a la actual pandemia que azota al mundo", denunció su hijo en Facebook.
La licencia extrapenal implica que Moya Delá salga de la prisión, pero continúa con sus derechos ciudadanos inhabilitados, y podría volver a ser encarcelado si las autoridades así lo deciden.