El activista político cubano Evert Oscar Matos Leyva, liberado bajo fianza el viernes y acusado de "otros delitos contra la seguridad del Estado", dijo estar de regreso y dispuesto a continuar adelante con su publicación El Caimán Libre.
"Estoy de regreso Cubita bella y orgullosísimo de cada garganta que gritó y cada corazón que susurró mi liberación", escribió en su perfil de Facebook.
En otra publicación en la misma red social, aseguró que desde cualquier parte del mundo es bienvenida la colaboración de los cubanos. "El premio es gordo: Patria y Libertad!", señaló.
Según publicó en sus redes Cubalex, Matos Leyva también está siendo acusado de "propaganda enemiga" por sus publicaciones en redes sociales. La policía política desea imputarle, además, que recibe financiamiento desde el exterior.
"La única 'prueba' que tienen es que recibe eventualmente recargas de telefónicas. Las mismas recargas que el régimen promociona y que engrosan los bolsillos de ETECSA se pueden convertir en un arma a usar contra quien disiente, cuando la policía política no tiene delitos reales que imputar", denunció el Centro de Información Legal, que dirige la abogada Laritza Diversent.
"Accedieron a darme mis tarjetas magnéticas y carné de identidad. Se quedaron con mi teléfono con las dos líneas que tiene puestas. Entonces me dijo: si tú no quieres abrir el teléfono, pues sencillamente nosotros tenemos las herramientas para conseguir lo que nosotros queremos y demostrar que tú eres financiado", dijo el activista a Cubalex.
"Me amenazaron con una directa que hice previa a mi detención en la que yo estaba con mi hijo en la casa. En el video yo estaba advirtiendo a mis amistades de lo que iba a suceder y de las razones por las cuales no había abierto la puerta a la Policía. No podía hacerlo hasta que no llegase la mamá del niño para que el niño se fuese con ella y no viera mi detención o dejarlo solo. Me estaban chantajeando con ese video como corrupción de menores, cuando yo estaba protegiendo a mi propio hijo", declaró.
Matos Leyva estuvo cuatro días detenido, en paradero desconocido e incomunicado.
