La Plataforma Cubana pro Derechos Humanos y la Propuesta 2020 lanzaron la "Iniciativa R-60" para promover la reforma del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Naciones Unidas tras la elección de Cuba para un asiento en esa organización.
La iniciativa, lanzada por Fernando Palacio Mogar y Manuel Cuesta Morúa, recuerda que luego de que La Habana se autopropusiera para un escaño en el Consejo, pese a su "pésima conducta en este campo, 170 países miembros de la ONU votaron a favor de su inclusión. El mensaje de estos Estados a sus propios pueblos y al pueblo cubano es incongruente con la naturaleza de la Carta Internacional de Derechos Humanos".
Advierte el documento de la propuesta que la Resolución 60 que dio origen al CDH es uno de los más importantes fundamentos de la gobernanza global y "merece ser rescatada por la ciudadanía en todo el mundo".
Esta busca "promover y respetar todos los derechos humanos de su ciudadanía, firmar y ratificar los pactos y los más importantes tratados en esta materia; aceptar y cumplir con las recomendaciones hechas por el CDH, respetar y actuar de acuerdo a los derechos y las garantías ciudadanos que reconoce su propio ordenamiento interno; e invitar y recibir a relatores especiales y a las distintas misiones que se designen u organicen por parte del CDH".
No obstante, el Gobierno cubano "está completamente divorciado de estos estándares", recuerda.
Por ello, la Iniciativa R-60, que está abierta para su adhesión a otras organizaciones y a la ciudadanía en general, busca "promover la Carta Internacional de Derechos Humanos; observar, monitorear y preparar informes y hacer recomendaciones relacionados con el cumplimiento de la R-60 en Cuba; y de los derechos y las garantías reconocidos en el ordenamiento jurídico cubano, a empezar por su Constitución".
También quiere "promover, junto a actores y organizaciones de la sociedad civil internacional y extranjera, reformas al CDH dirigidas a que solo puedan postular para integrar el CDH aquellos Estados que cumplen estrictamente los estándares de la R-60 y su ordenamiento interno en materia de derechos y garantías ciudadanos".
Asimismo, "que los ciudadanos y las ciudadanas, además de las organizaciones de la sociedad civil, tengan un espacio permanente en el CDH, sobre todo provenientes de países donde la violación de derechos humanos es sistemática y estructural".
Igualmente, que "los ciudadanos puedan promover, mediante un número determinado de firmas, la visita de Relatores o en su caso Misiones, incluyendo el Alto Comisionado, a sus respectivos países para verificar in situ el cumplimiento tanto de las leyes del país como de la Carta Internacional de Derechos Humanos".
Porque Corea del Norte no tiene su asiento en el CDH... que injusticia prevalece en el seno de la ONU.
Y esa propuesta está sujeta a la aprobación de los mismos violadores históricos. Eso da risa.