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Represión

Un activista de la UNPACU encarcelado se declara en huelga de hambre

La acción es en protesta por dos brutales golpizas, dirigidas por las autoridades, que le han propinado en prisión.

Santiago de Cuba
Ovidio Martín Castellanos.
Ovidio Martín Castellanos. UNPACU

Ovidio Martín Castellanos, miembro de la dirección nacional de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y promotor de Cuba Decide, comenzó una huelga de hambre en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba, tras ser víctima de brutales golpizas en el presidio.

De acuerdo con la denuncia de la activista Katherine Mojena, el pasado 17 de noviembre Martín Castellanos tuvo su visita conyugal, pero al regresar a su destacamento, fue golpeado por varios presos, indicó Cubanet.

La agresión, dirigida por las autoridades, es el segundo ataque violento del que es víctima Martín Castellanos en prisión, pues había sufrido otro a inicios de octubre. Después de este maltrato, el activista comenzó la huelga en protesta por esa clase de atropello.

Martín Castellanos fue detenido el pasado 7 de septiembre durante un asalto de fuerzas combinadas del régimen a su vivienda, desde donde dirige la célula Wilman Villar Mendoza de la UNPACU, ocasión en que fueron detenidos otros activistas que acabaron posteriormente liberados.

Sin embargo, el 11 de septiembre Ovidio fue trasladado desde la Segunda Unidad Policial de Santiago de Cuba, conocida como El Palacete, hacia el Tribunal Provincial, donde le realizaron un juicio sumarísimo, sin siquiera ofrecérsele el derecho a un abogado.

Las autoridades lo condenaron a cinco meses de prisión por el supuesto delito de impago de multas, una de las medidas que aplica regularmente el régimen contra los opositores para doblegarlos. Finalmente, Martín Castellanos fue trasladado a la prisión de Aguadores, desde donde llamó a su familia para informarle lo que había acontecido.

La UNPACU ha denunciado este año alrededor de 500 detenciones arbitrarias y varias decenas de allanamientos. Actualmente, 49 de sus miembros están cumpliendo injustas sanciones políticas, entre ellos su máximo líder y fundador, José Daniel Ferrer García, quien tras más de 80 días de encarcelamiento permanece incomunicado. En este tiempo, las autoridades carcelarias solo le han permitido recibir dos visitas.

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