La Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) envió una carta a la agencia de noticias EFE desmintiendo un artículo de su corresponsalía en Cuba que reflejó una realidad de abundancia y celebración con puercos asados y "vivas" a la celebración del triunfo de la "Revolución".
Entre las frases que destacan en el artículo se puede leer que "En Santiago, la abundancia y diversidad de productos en las calles contrasta con ciudades como La Habana, donde continúa la escasez de pan, y las ventas especiales para la fecha son más modestas".
El reporte señaló que los "santiagueros dieron vivas" y celebraron con lechón asado el nuevo aniversario de la Revolución socialista encabezada por Fidel Castro.
El líder de UNPACU, José Daniel Ferrer, calificó de "poco realista" y "poco objetivo" el despacho, pues según su opinión la gran mayoría del pueblo hace luto por su miseria, por su falta de libertades, por sus nulas expectativas de futuro.
En una nota publicada en el sitio de la organización, apuntó que hoy en la Isla los que pueden asar un cerdo para celebrar el año nuevo son los mismos que desde hace 60 años: los dirigentes y un puñado escaso de privilegiados más entre el pueblo.
Ferrer recordó que el puerco asado como parte consustancial de la cena de fin de año en Cuba es una vieja tradición, y no está relacionada con celebrar el aniversario de la llegada de Castro al poder, como sí "ha querido hacer ver" el Gobierno desde hace décadas.
Agregó que la realidad de Santiago de Cuba no es distinta a la de toda la región oriental, y si en La Habana se puede hablar de escasez, en Santiago de Cuba esta es igualmente endémica. Como ejemplo, mostró un vídeo grabado en un barrio santiaguero el 29 de diciembre pasado, donde aparecen numerosos vecinos haciendo cola para adquirir los huevos que les corresponden por la cartilla de racionamiento.
Este alimento ha sido durante mucho tiempo el "plato fuerte" más accesible a los cubanos, algo que ahora se agudiza con la creciente escasez de productos como el pan y los cárnicos.
La UNPACU, que dirigió una carta al director de la agencia EFE, el periodista español Fernando Garea, no ha recibido respuesta a su reclamación.