Los tres sacerdotes cubanos que enviaron a finales de enero una carta al general Raúl Castro ahora quieren hacerla llegar al papa Francisco, explicó a la emisora radial española Cadena Ser, Castor Álvarez Devesa, uno de los firmantes.
La misiva reclama a Raúl Castro libertades religiosa y de expresión, alternativas educacionales e independencia de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial ante la "ausencia de un Estado de derecho" en la Isla.
Los párrocos también criticaron el "desamparo económico en que vive el pueblo cubano" y demandaron "elecciones libres".
Sobre la misiva, Álvarez Devesa señaló que "tiene el apoyo implícito de autoridades eclesiásticas cubanas, aunque no explícito".
"Algún obispo nos ha dicho, alguien tiene que hablar así, que levanten su voz. Hemos querido hacer algo que sabemos que muchos católicos cubanos agradecen", añadió al respecto.
Acerca de la posición de la Iglesia abundó: "Quizás la Iglesia esta algo dividida entre los que quieren hablar íntimamente con las autoridades y otros que queremos hacerlo delante del pueblo".
La jerarquía eclesiástica eludió hacer comentarios sobre esta misiva y dijo que solo se pronunciarían en materia doctrinal si era necesario hacerlo.
De la intención de entregar la carta al papa Francisco señaló: "Vamos a tratar de que llegue al papa la carta de alguna forma y quisiéramos que en la Iglesia hubiera esa unión entre todos para buscar la libertad del pueblo cubano".
Sobre las "elecciones" organizadas por el régimen que culminarán con la supuesta salida de la Presidencia del general Raúl Castro en abril, el sacerdote opinó: "Es una coyuntura especial que queremos que se convierta en alegría y esperanza para el pueblo. Unas elecciones. No votar para que se mantenga lo mismo que solo trae pesar".
Álvarez Devesa se encuentra en España invitado por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos. A su regreso a Cuba, no sabe lo que le espera: "Bueno, en Cuba nosotros algunos nos hemos decidido a lo que sea, porque una situación como la que vivimos allí, lo mismo puede esperarte prisión, desprestigio o incluso lo que sea… morir por la patria. Es una decisión que hemos tomado y creemos que era bueno".
"La Iglesia cubana nunca se ha destacado por presentar una posición crítica contra el régimen comunista de los Castro. Ha preferido, callar ante los abusos de una dictadura que ha dejado a los cubanos sumidos en el ostracismo, el silencio y la penuria económica", concluye Cadena Ser.