La Comisión Nacional de Béisbol cubana (CNB) confiscó el miércoles el último partido de Santiago de Cuba en su subserie ante Artemisa de la Liga Élite, al conceder la victoria a los Cazadores por una violación del reglamento cometida por las Avispas, reportó la agencia oficial Prensa Llatina.
El choque concluido en la madrugada del miércoles había resultado un éxito para los santiagueros (11-9), pero los artemiseños interpusieron una protesta por el uso de un lanzador inhabilitado para esa jornada debido a la cantidad de picheos que había realizado en sus últimas salidas.
Los organizadores del torneo dijeron al término del choque que revisarían los informes correspondientes y darían respuesta a la reclamación de los Cazadores.
Tras realizar las pesquisas, la CNB determinó que Yoendris Montero no estaba habilitado para trabajar en ese juego porque el pasado sábado registró 27 envíos y el domingo 23, suma que por reglamento lo obligaba a tomar dos días de descanso.
El artículo 5.1.1 del reglamento del torneo, en su inciso J, explica que "cuando un lanzador sea utilizado en días consecutivos el descanso dependerá de la sumatoria total de lanzamientos realizados en los días consecutivos en que participó".
Como consecuencia de la infracción cometida por el equipo santiaguero, y de acuerdo a las reglas del béisbol para estos casos, el marcador final del encuentro es de nueve carreras por cero en contra del equipo que cometió la violación. Además de la confiscación del juego, se determinó suspender por tres encuentros al entrenador de picheo santiaguero Fernand Blanc, en consonancia con el citado reglamento.
Tras los ajustes en la tabla de posiciones, Matanzas lidera el ordenamiento con saldo de 15-9, seguido por Sancti Spíritus (13-11), Artemisa, Industriales y Las Tunas (12-12), y Santiago de Cuba ocupa el último puesto (8-16). Hoy se reanuda la liga invernal cubana con los enfrentamientos entre ART-IND, MTZ-LTU y SSP-SCU.
Este episodio viene a agrandar la debacle que ha sufrido la II Liga Élite del Béisbol cubano en los últimos días. Como ya reportó el columnista de DIARIO DE CUBA Enrique del Pozo, "la caja de Pandora que guarda todos los males del béisbol cubano se destapó y ha convertido la II Liga Élite en uno de los campeonatos de más baja calidad que recuerden los fanáticos de este deporte en la Isla".
Resultan alarmantes las 196 pifias cometidas hasta el momento (más de 60 que en igual etapa de la primera versión de la Liga Élite), los 541 boletos en 71 juegos y la cantidad de fallas técnicas que se aprecian a diario.
Además hay un total de 25 peloteros expulsados por indisciplina y tres árbitros retirados de sus funciones por mal trabajo. Otros tres árbitros fueron suspendidos varios juegos por el mismo motivo. Estas cifras demuestran hasta dónde ha llegado el béisbol en la Isla.