La selección cubana recibió este domingo su segundo nocaut en cinco presentaciones durante la IX Copa Mundial de Béisbol Femenino. De esa forma, se despidió de la ciudad japonesa de Miyoshi, sede del torneo, sin la posibilidad de asistir a la discusión de medallas, que será el próximo año, según el nuevo formato de competencia.
Apenas una victoria, ante la débil selección de Francia, alcanzaron las dirigidas por el debutante René Sarría, un hombre que tomó el mando a última hora sin que mediara ninguna declaración oficial por parte de la comisión nacional de ese deporte.
La derrota en esta jornada a manos de las anfitrionas y actuales campeonas del orbe, se suma a las sufridas ante China Taipéi, Venezuela (todas clasificadas para la final) y Puerto Rico. Esta última también fue por fuera de combate.
Con este balance de 1-4, las cubanas quedaron relegadas al quinto puesto de su grupo B y al décimo de la clasificación general. Esta constituye su peor actuación histórica en estos eventos.
En sus otras presentaciones mundialistas, las cubanas se habían ubicado sextas en las ediciones de 2006 y 2010, séptimas en la pasada cita de 2018, y dos veces octavas en 2012 y 2016. Con esos resultados, gozaban de un séptimo lugar en el ranking mundial, que seguramente tendrá cambios después de esta competencia.
Un pobre average ofensivo de .245 y un elevado promedio de carreras limpias permitidas de 8.49 fueron el fruto de la ausencia este año de un campeonato nacional. Al igual que muchos otros torneos deportivos, el de béisbol femenino fue suspendido por la grave crisis económica que se vive en Cuba.
El béisbol para mujeres en Cuba se ha convertido en los últimos tiempos en un deporte de laboratorio. Eso está dejando a las selecciones en franca desventaja con relación a las de otros países, donde las atletas se mantienen jugando durante todo el año.
Con estos precedentes, era casi imposible que pudieran firmar una buena actuación, como había vaticinado DIARIO DE CUBA en un artículo previo a la competencia.
Dos derrotas ante las venezolanas en el clasificatorio de América y seis frente a las puertorriqueñas en un tope de confrontación efectuado el pasado mes de mayo en La Habana constituían un preámbulo de lo que podía ocurrir en Japón, a pesar de las opiniones de periodistas en medios oficiales, que aseguran existe un desarrollo en este deporte.
Aunque el béisbol femenino se comenzó a jugar en Cuba de forma oficial a mediados del siglo pasado, no fue hasta el 2014 cuando se organizó la primera copa nacional. De estas, apenas se han jugado seis en todos estos años (con carácter regional la mayoría de ellas). Ello evidencia el poco apoyo que ha tenido por parte de las instituciones gubernamentales.
Después de su debut en las arenas internacionales en 2005, las mejores actuaciones de las peloteras cubanas han sido una medalla de bronce en el I Campeonato Panamericano efectuado en Venezuela 2009 y un quinto escaño logrado en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2015.
Qué pena!!! Ya Cuba no gana, ni en la pelota.
Juventud Rebelde reportó así:"El equipo femenino dijo adiós al Mundial de la categoría luego de una actuación discreta" !!!!!!! Jajajajajaja