Miles de cubanos abarrotaron el estadio loanDepot Park de Miami, donde se juega la primera semifinal del Clásico Mundial de Béisbol entre Cuba y Estados Unidos, portando carteles con consignas contra la dictadura, banderas cubanas, fotos de presos políticos y usando camisetas con la frase "Patria y vida".
Representantes del exilio protagonizaron una protesta en el exterior de la instalación, a la que asistieron líderes de la comunidad, y en la que se interpretó el himno cubano y se mostraron fotos de víctimas de la dictadura y de los numerosos presos políticos en cárceles del régimen.
La selección cubana que disputará el partido hizo su calentamiento en el terreno antes del juego. El mentor Armando Johnson ofreció una conferencia de prensa previa al encuentro, donde dijo, en relación con las protestas: "Aquí nosotros venimos a jugar béisbol. No nos preocupan los que vengan a provocar a los jugadores", citó la oficial Radio Rebelde.
De acuerdo con los organizadores, se espera un lleno completo en el estadio, cuya capacidad es de 36.742 espectadores.
Más temprano el domingo, el alcalde de Miami, Francis Suárez, informó que el equipo de los Marlins dio su autorización para que los aficionados que lo deseen ingresen al estadio con pancartas, banderas cubanas y camisetas que llevan la inscripción "Patria y vida".
Durante una rueda de prensa celebrada en los exteriores del estadio, y a la que asistieron miembros de varios grupos del exilio cubano que se oponen al régimen de la Isla, Suárez dijo: "Para mí esto es mucho más grande que Cuba, tiene que ver con el virus del socialismo y del comunismo, que es un engaño", citó EFE.
Dijo que el partido es una buena oportunidad para comparar por un lado la libertad como un derecho fundamental en Estados Unidos, mientras que en Cuba "la gente no puede expresarse libremente" por culpa de una "falsa ideología" que promete igualdad.
Mientras, en sitios públicos de las principales ciudades cubanas, las autoridades han dispuesto pantallas para exhibir el partido. En La Habana, el cine Yara transmite el juego.
El team aserrin entre el papelazo y el servilismo.
Los que querían darle una alegría al pueblo lograron su objetivo. Los esclavos están felices y festejando la victoria de EEUU aunque mañana tengan que volver a las colas y la escasez.
Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja…..QUÉ RICOOOOOOOOOOOOOOOOO….tremendo saco de patadas por el culo que le están dando al equipito de la dictadura, ja, ja, ja, ja, ja, ja…