A pesar de sufrir la fuga de siete de peloteros, el equipo nacional cubano de béisbol que compite en la III Copa Mundial para menores de 23 años, logró su pase a la llamada Súper Ronda del torneo, al vencer este martes al conjunto de República Dominicana 6 por 2, para terminar segundo en su grupo clasificatorio.
Los dirigidos por Eriel Sánchez salieron al campo de juego del estadio de los Yaquis de Obregón con un solo jugador de cambio en la banca y seis lanzadores en el bullpen. Sin embargo, una vez más gozaron de un buen trabajo de sus serpentineros y se llevaron la victoria.
Aun con muchas deudas ofensivas, los cubanos lograron fabricar cuatro carreras en la parte alta del segundo capítulo, cuando ligaron par de sencillos con un boleto y un elevado de sacrificio, suficientes contra un equipo quisqueyano que no enseñó nada en la competencia desde el cajón de bateo.
El zurdo matancero Naykel Cruz trabajó durante seis innings, repartiendo nueve ponches mientras solo se equivocaba una vez, cuando le sirvió una recta dócil al centro del home a Cristopher Pujols, que desapareció la esférica con un compañero en las almohadillas.
Los cubanos ligaron un total de diez imparables, algo que no habían podido hacer en ninguno de sus partidos anteriores. El máscara Andrys Pérez, el torpedero Rangel Ramos y el camarero Rodoleisis Moreno, este último con triple incluido, conectaron un par cada uno.
Este miércoles los de la mayor de las Antillas chocarán con Venezuela en el primero de tres partidos que le restan para llegar a la definición de las medallas de este campeonato. Colombia y Panamá son los otros elencos que tendrán que ver en el campo, si se lo permite la fuga constante de sus peloteros.
Entonces los 7 que se fueron sobraban