Tras elegir a los receptores, continuamos con la selección de los tres peloteros por posición que, a nuestro juicio, más han destacado en las Series Nacionales.
En el lapso de 60 temporadas, son muchos los cambios que han ocurrido. Diferentes tipos de bates, de pelotas, de estructuras de torneo. También la calidad ha tenido algún que otro pronunciado altibajo. Así, se hace difícil comparar estadísticas y actuar con total justeza a la hora de elegir.
Sin embargo, el impacto que tuvo cada uno de estos inicialistas en su época, y la huella que dejaron en generaciones de aficionados, son sin dudas un argumento de peso a la hora del veredicto final.
Hoy le toca el turno a los defensores de la primera base. Hablamos de una posición eminentemente ofensiva, donde a lo largo del tiempo han surgido muchas estrellas y sluggers que nos han deleitado con sus tremendas conexiones por encima de las cercas. Aquí van:
Antonio Muñoz, durabilidad y entrega
"El gigante del Escambray" fue un bateador natural, de esos que no necesitaron escuelas ni clases de técnicas beisboleras. Su impresionante rendimiento durante 24 campañas lo ubica como el único defensor del primer cojín que ha jugado más de 16.000 entradas en nuestros clásicos nacionales.
Miembro del Salón de la Fama del béisbol cubano, promedió .302 de average en 6.676 turnos oficiales al bate, disparó 370 cuadrangulares y remolcó 1.407 carreras durante su carrera deportiva.
Muñoz ganó ocho veces el liderato de jonrones y fue el primero en llegar a la cifra de 200 y 300 vuelacercas en Series Nacionales, además de ser seleccionado dos veces como Jugador Más Valioso (MVP) en campeonatos mundiales.
Al momento de su retiro, estaba al frente de casi todos los departamentos ofensivos en Series Nacionales, demostrando que no tuvo rival en la época en que le tocó jugar.
Orestes Kindelán, fuerza y concentración
Aunque "El tambor mayor" comenzó su carrera como receptor y fungió muchas veces como bateador designado, fue en la primera base donde se desempeñó más tiempo, por lo que su inclusión cabe perfectamente en este listado.
Miembro del Salón de la Fama de la pelota cubana, el santiaguero jugó 21 campeonatos ocupando casi siempre el turno de cuarto bate por el tremendo poder de sus muñecas, al punto de ser el máximo jonronero cubano de la actualidad, con 487 bambinazos, y el que más carreras ha impulsado, con 1.511, además de terminar con un excelente promedio de bateo de .313.
Kindelán tiene el récord de más jonrones en dos campañas consecutivas, al pegar 51 en 1988 (entre la Serie Nacional y la Selectiva), y 48 en 1989, para un total de 99.
"El tambor mayor" representó a Cuba en más de 20 torneos internacionales a lo largo de su carrera y tiene el privilegio de ser campeón olímpico, centroamericano, panamericano y mundial.
En el año 1989, Kindelan se adueñó de la triple corona de bateo en la Serie Nacional, así como en los dos torneos internacionales donde participó, algo que ningún otro pelotero en la historia ha podido lograr.
Agustín Marquetti, estilo y leyenda
"El toletero de Alquizar" es el autor de dos memorables cuadrangulares en la historia del béisbol cubano. El primero de ellos, en una final de Campeonato Mundial contra el equipo de Estados Unidos, y el otro, quizás el más espectacular de la historia de las Series Nacionales, para dejar al campo a los Vegueros de Pinar del Rio y darle la victoria a los Industriales en la temporada de 1986.
Dueño de un refinado estilo de bateo, a Marquetti le tocó jugar la mitad de su carrera en una época donde el bate de madera y la poca calidad de la pelota de juego mermaban los números ofensivos, pero aun así logró terminar con .288 de average de bateo (solo le faltaron 65 hits para los 2.000), conectó un total de 207 cuadrangulares, e impulsó 1.106 carreras.
El paso de Marquetti por el béisbol cubano dejó una huella que difícilmente podrán olvidar los aficionados. Al momento de colgar los spikes, se encontraba entre los primeros en varios acápites ofensivos, con 22 temporadas en el diamante, habiendo integrado la selección nacional en múltiples ocasiones, entre ellas seis campeonatos mundiales, tres panamericanos, dos centroamericanos y una copa intercontinental.
En el béisbol cubano, se iniciaba una 1ra base que sentó a Marquetti y se malogro con la venta del juego..HÉCTOR DESPAIGNE..
Oigame el hombre que mas rápido sacaba el bate, con su característico andar lento, arrastrando el bate, parada inusual en el home, bate pegado al cuerpo, sin ejecutar el swing..
y defensivamente un chiclet para coger y estirar..HÉCTOR DESPAIGNE..
Tremendos chivatones que eran todos, recuerdo que estando yo en villa marista preso el tal marquetti entraba y salia con una pistola en la cintura junto a su tio que era otro hp.
Despues de mi padre, la persona que yo mas admiraba cuando ninno era Marquetti, hasta aprendi a batear a la zurda siendo derecho , yo y la mitad de mi generacion lo imitaba; la otra mitad imitaba a Munoz; cosas de la infancia.
Merecidísimo lo de Marquetti.