Cortázar
Decía Cortázar que lo importante en la vida era "tener proyectos". Así, en plural. Para el argentino, no importaba demasiado que la mayoría de esos proyectos se diluyese en la nada, lo importante era acabar, al menos, uno. Supongo que así sucede con todas las cosas. Lo de las opciones A y B no es solo un ardid de manuales de autoayuda. Mentalmente, vamos llenando el diario vacío vital con variantes y contra-variantes, con listados de cosas pendientes: "Regar las plantas de la terraza"; "llevar el gato al veterinario"; "escribir esa carta". Tal vez uno de los focos de la locura enciende su llama cuando esos caminos por recorrer se entrecruzan y confunden: cuando empezamos a escribirles a las plantas, a rociar con agua al gato, a llevarle al veterinario las cartas que nos llegan. ¿O será ello acaso el primer brote de creatividad, el inicio de un nuevo proyecto? ¿No se insinúa ya en este aparente caos la estructura de Rayuela?
Oyendo 'Ornithology' de Charlie Parker
Más que el remedo impresionista del trino de unas aves, como podría sugerir el título, Parker nos lleva de la mano, en un alegre y bullicioso desfile, a través de una galería de pájaros disecados, exhortándonos a imaginar e imitar las voces de esas criaturas de inertes vidas rellenas de paja, a insuflarles vitalidad con nuestra algarabía, en un alborozado gesto de compasión.
Leyendo la poesía de A. S. R.
No puedo dejar de ver, en buena parte de esta poesía de pretensiones transcendentales, un misticismo aséptico y local funesto. En ocasiones creo estar leyendo a Valente en una transparencia colocada sobre paisaje canario. Asocio la poesía de Sánchez con el "Calatravarium", el Auditorio de Tenerife: una "modernidad" cuestionable, de líneas de apariencia minimalista, entre místicas y naturales, pero abigarradas en su resultado; una modernidad egocéntrica, impostada, derrochadora de recursos y fuera de lugar. ¿Habrá una relación entre la errática voluntad "modernizadora" de los partidos de Gobierno en Canarias y la "modernidad" impuesta por A. S.?
Bodas de sangre
En esta poética vorágine danzaria, con su silencioso duelo final a navaja, en un ritual fácilmente asociable al teatro japonés, se rinde homenaje a lo pre-verbal, a lo "inverbalizable". En la escena de la muerte de ambos rivales ante la amada, la disposición en el encuadre de los tres personajes, vestidos en combinaciones de blanco y negro, dibuja un triángulo (amoroso) que recuerda las teclas de un piano destrozadas por los martillazos de la vida.
Nilo Palenzuela
"Impostar, decir la verdad, ¿cómo se mide?, ¿hay un aparato para medir cuánta verdad y cuánta mentira caben en las palabras?" (Nilo Palenzuela, Paisajes y partidas).
Estas palabras, ¿dónde nos llegan? ¿Al alma, al corazón? Es lo que suele decirse. Pero una reflexión así, tan cierta como incómoda, causante de tanto desasosiego, llega más bien como una hermosa patada en los testículos. Es dolorosa, sí, pero nos reafirma, a la fuerza, en la necesidad de despertar. Nos recuerda que has de intentar alzar tu cuerpo del mullido lecho de la palabrería, que debes apartar las sábanas aparentemente pulcras (pero manchadas de grasos sudores a veces invisibles) de la impostura.
José Aníbal Campos nació en La Habana, en 1965. Ha traducido, entre muchos otros autores de habla alemana e inglesa, a Peter Stamm, Stefan Zweig, Hermann Hesse, Ingeborg Bachmann, Uwe Timm, Hans Magnus Enzensberger, Peter Berling, Franz Schätzing, Pascal Mercier, Hans Sedlmayr y Philip Ball. Estos textos pertenecen a un libro en preparación: Fragmentaria.
Otros fragmentos de ese libro: Equivalencias: Anecdotario y Equivalencias.