Este domingo, en su casa y rodeado de su familia, falleció a los 88 años el actor francés Alain Delon, ícono del cine mundial, informaron sus familiares en una nota enviada a la AFP. "Alain Fabien, Anouchka, Anthony y (su perro) Loubo están profundamente entristecidos al anunciar el fallecimiento de su padre. Murió pacíficamente en su casa de Douchy, rodeado de sus tres hijos y su familia", dijeron, al tiempo que pidieron privacidad y discreción en torno al tema.
Delon estaba gravemente enfermo desde que sufrió un accidente cerebrovascular en 2019, del que arrastró secuelas hasta el desenlace de este domingo, además, se le había detectado un linfoma y, en abril, fue sometido a una tutela forzada, solicitada por su hijo mayor, Anthony Delon, de 59 años, a lo cual se opuso públicamente su abogado. Este hecho motivo una agria disputa entre sus descendientes, que opuso a sus hijos varones, por un lado, y a su hija, por otro.
"Alain Delon ha desempeñado papeles legendarios y ha hecho soñar al mundo, prestando su rostro inolvidable para poner nuestras vidas patas arriba. Melancólico, popular, secreto, era más que una estrella: un monumento francés", escribió en su perfil de X el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
Por su parte, Marine Le Pen, líder del partido de extrema derecha Reagrupamiento Nacional, escribió: "Una pequeña parte de la Francia que amamos se va con él". "Es un alivio para él, su enfermedad era horrible", afirmó Gilles Jacob, expresidente del Festival de Cannes.
Desde su debut, en 1957, a los 23 años, Delon acumuló papeles en 88 películas, siete películas para televisión y siete obras de teatro. Delon, considerado un sex simbol de su tiempo y muy popular en Cuba, interpretó célebres papeles en El gatopardo y Rocco y sus hermanos, de Luchino Visconti, en A pleno sol, de René Clément, en El eclipse, de Michelangelo Antonioni, o en Nuestra historia, de Bertrand Blier. Por este último recibió el único premio César que le fue otorgado, a pesar de su popularidad y de ser uno los actores más cotizados de su generación.
A lo largo de su carrera compartió escena con otros mitos del cine como Mónica Vitti, Claudia Cardinale, Jean Paul Belmondo o Paco Rabal. Asimismo, fue dirigido por otras estrellas como Jean-Pierre Melville, Jacques Deray, Louis Malle y Jean-Luc Godard. Además, dirigió dos largometrajes y produjo 32 títulos.
Su despedida del mundo del cine ocurrió en el Festival de Cannes de 2019, cuando recibió la Palma de Oro de honor, como homenaje a toda su carrera. "Para mí, más que un final de carrera, es un fin de vida. Esta noche es un homenaje póstumo a mi vida. He durado 62 años y ahora sé que lo más difícil es irse. Pero no me iré sin darles las gracias", dijo Delon en ese momento.
En los últimos años, ya en el declive de su carrera, a fines de los años 90, su amistad declarada con Jean-Marie Le Pen, fundador del partido de extrema derecha Frente Nacional, su defensa de la pena de muerte o sus comentarios homófobos terminaron por empañar su imagen.
Además, el movimiento MeToo en Francia lo acusó de "racista, homófobo y misógino". Durante una entrevista con la televisión francesa, Delon reconoció haber pegado a mujeres. "Si una bofetada es macho, entonces soy un macho", dijo, y aclaró que las mujeres también le habían pegado a él. Además, calificó la homosexualidad como algo "en contra de la naturaleza".
Más allá de las polémicas, Delon es considerado "uno de los últimos gigantes del cine francés" y en una ocasión declaró que lo que más le impresionaba en el sector del cine era "el sentido del honor, de la amistad, el respeto, todo eso que ya no existe en nuestros días, todo eso que casi desapareció con el general De Gaulle".
Para mí, Alain Delon fue un actor de películas bien hechas, y nada más, igual que Paco de Lucía fue un tremendo intérprete de flamenco con su guitarra, y nada más. Si Delon apoyó a la derecha francesa, o si lamentablemente era homófobo, lo que recordaré de él es su actuación con Monica Vitti en El Eclipse, la de Rocco y sus Hermanos, El Samurai, o Borsalino and Co.