El himno religioso "Virgen mambisa", escrito por los cubanos Rogelio Zelada y Orlando Rodríguez, adquiere nueva vida en la versión "Virgen mambisa [Exiliada]", que los intérpretes Haydée Milanés y Pavel Urkiza le dedican, y cuyo videoclip tendrá su estreno este miércoles 6 de diciembre en la Ermita de la Caridad, de Miami, santuario dedicado a la Patrona de Cuba.
Con la colaboración del violinista cubano Alfredo Triff y la Coral Cubana, el audiovisual forma parte de los homenajes al medio siglo de creación de la Ermita, fundada en 1967 y reconocida desde 2000 como Santuario Nacional de Estados Unidos. Durante décadas, ese recinto ha estado asociado a la libertad de Cuba, aunque los fieles de la Caridad piden también por otros países con regímenes totalitarios, como Venezuela y Nicaragua.
El cineasta cubano exiliado Eliécer Jiménez Almeida se encargó de la producción del tema musical y de la dirección del videoclip, que decidió convertir además en un homenaje al exilio cubano.
Según contó el realizador a DIARIO DE CUBA, tras escuchar el tema original, decidió que era una buena oportunidad para sacar la plegaria del marco religioso.
"Tengo la habilidad de convertir los encargos en obras personales, y la Virgen de la Caridad es algo tan importante para los cubanos, que hice mío este proyecto. Llamé a Pavel Urkiza, que es de los músicos más importantes que ha dado Cuba, y con quien había trabajado. Sé que Pavel encuentra una solución para cada problema. Cuando tienes un proyecto de este tipo, que tienes que hacer rápido y sin tanto dinero, él era la persona para esto. Haydée Milanés estaba recién llegada a Miami, y la invitamos. Ella aceptó cantarla. Pavel se encargó de la producción musical y yo de la producción ejecutiva del proyecto", resumió.
Jiménez Almeida recordó que "Virgen mambisa" ha sido censurada por el castrismo. En especial la estrofa que reza "Que se adelante la hora / de nuestra liberación" ha sido evitada en los cultos en la Isla.
"Eso fue una gran motivación para mí. Tú conoces de mi vocación por reescribir la historia mutilada de ese país. Vi que, como íbamos a transformar tanto esta canción desde el punto de vista musical, debíamos también incorporarle esta palabra, exiliada, que le da la connotación de que la hacíamos desde Miami. Es decir, que la estamos liberando de la censura", explicó
"Siempre pienso mucho en esta frase que dice mi amigo Alejandro Ríos, 'Sin Miami no hay país'. Si en una época en Cuba se decía 'Sin azúcar no hay país', hoy sin Miami no hay país. Y bueno, la Historia de Cuba, para suerte nuestra, se ha conservado lo mejor que se ha podido aquí en Miami".
Según Jiménez Almeida, trabajar con Haydée Milanés y Pavel Urkiza es el sueño de muchos realizadores y productores cubanos. "Pavel es una persona muy humilde, y como es tan profesional, es un guía espiritual, digamos, de un proyecto. Por eso me ayudó infinitamente en la producción de todo. Y Haydée es esa voz del espectro nacional de la canción cubana tan importante, tiene una voz muy especial", señaló.
"Debíamos mostrar y demostrar que la comunidad exiliada en Miami ha hecho un gran esfuerzo por preservar la cultura cubana. Hay una larga historia de estigmas en su contra, que son parte del castrismo. Empezaron con el castrismo, pero incluso personas anticastristas los promueven en el mundo entero. Siempre quienes vivimos en Miami somos vistos como gente incivilizada, inferior. Todo lo contrario a lo que sucede aquí", recordó.
Aunque el cineasta fue el productor general de todo el proyecto, este era su primer videoclip, por lo que las dudas lo asaltaron desde el inicio.
"La realización del video decidí afrontarla haciendo un documental, lo que yo sé hacer. No puedo decir que inventé una fórmula para el videoclip, porque no tengo fórmula para los documentales, es como me salgan. Más que un videoclip, lo considero un documento nacional sobre cómo los cubanos vemos a la Virgen de la Caridad, y en especial cómo yo la veo. Hay imágenes en el videoclip de muchos de mis filmes, pero también de mi madre y de mi padre, para que tengas una idea de lo personal que ha sido este acercamiento", señaló.
No solo personalidades importantes de la Historia de Cuba aparecen en las imágenes del audiovisual. También hechos que han marcado la resistencia de los cubanos frente a la dominación totalitaria pasan por él, desde el éxodo del Mariel y la denominada Crisis de los Balseros de 1994 hasta el 11J, o figuras del exilio como Carlos Alberto Montaner, Celia Cruz, Reynaldo Arenas, Nicolás Guillén Landrián, Guillermo Cabrera Infante, o de la resistencia cívica en la Isla, como Oswaldo Payá y Luis Manuel Otero Alcántara.
"Pudiera parecer que yo tengo una idea fija con esto de reescribir la Historia de Cuba, de reescribir la nefasta narrativa de la revolución cubana; pudiera pensarse que yo estoy dedicando mi vida a eso, y el que lo piensa está en el camino correcto. Aunque a mí me gustan muchas cosas, ciertamente dedico mucho tiempo a desmentir la narrativa de la revolución cubana", enfatizó Jiménez Almeida.
"La 'Virgen mambisa' forma parte de ese trabajo que voy haciendo durante 15 años ya desde el cine, de contar historias completamente alternativas a la revolución cubana, y brindarle a las personas que se acercan a mi trabajo la oportunidad de conocer un relato completamente distinto al de la revolución y mucho más cercano a la realidad, una versión honesta de lo que yo considero debiera ser Cuba".
"Yo no creo en la objetividad, yo creo en la honestidad, y por ese camino ha transcurrido mi trabajo y sobre esa idea quiero hablarle a los cubanos con la 'Virgen mambisa exiliada'. La virgen es ese factor común entre todos los cubanos, es la madre de todos los cubanos, y espero que les pueda hablar y les pueda tocar el corazón. Que podamos entender que tenemos la responsabilidad y la necesidad de construir un país para todos, sin exclusión ninguna. Que Cuba sea un lugar donde los cubanos puedan ser y sentirse felices", finalizó.
Además de Milanés y Urkiza en las voces, participaron en la grabación del tema musical Yissy García en batería; Michael Fernández en el bajo; Roberto Vizcayno en la percusión y Michel Ferré en el piano.
