"¿Por qué quiero ir a Marte? Quiero ver mi realidad desde otro ángulo, quiero ver mi isla desde otro ángulo, quiero ver mi mundo desde otro ángulo, quiero reinventar la esperanza. No me importa si es roja, no me importa si es marciana, quiero reinventar la esperanza." Con este fragmento, la actriz y escritora Gessliam Suárez, lanza la campaña de crowdfunding para el montaje en La Habana de la pieza Vámonos a Marte.
Esta es la primera obra teatral escrita por Suárez, y será dirigida por la actriz y directora Mariam Montero, junto a su grupo La Perla Teatro.
"Una madre soltera no resiste los trabajos que pasa para sobrevivir, comprar comida y mantener a su hijo. Entre las soluciones que busca, la emigración se vuelve en su única salida. 'Vámonos a Marte', le dice a su pequeño para disfrazar la decisión de emigrar a otro sitio lejos de todo lo que una vez conocieron. En ese trance el niño crece, hace su vida, entiede el proceso al que fue sometido desde su inconciencia y comienzan los conflictos internos", hace una sinopsis a DIARIO DE CUBA Gessliam Suárez, quien además forma parte del elenco de la obra, representando a la madre.
"Es un espectáculo que se plantea como estética plasmar la realidad recreada desde el imaginario de un niño de ocho años, donde texto e imagen contrastan en un viaje con elementos del musical, las artes plásticas, el videoarte y la performance. Se tocan temas de la contemporaneidad como el mundo del entretenimiento y las redes sociales, junto a otros de carácter más filosófico como la búsqueda de un propósito en la vida y la conquista de la felicidad", añade.
Gessliam juega con la realidad, la ficción y elementos de su vida para conformar el guion. Los personajes no tienen nombres, son los millones de cubanos que han emigrado en busca de futuros posibles. El elenco está compuesto por el actor y cantante Rolando Rodríguez Alfonso, el niño Diego Henríquez Suárez, Annieye Cárdenas, Mariam Montero y la propia Gessliam Suárez.
La campaña de recogida de fondos pretende llegar a un monto de 1.850 dólares antes de octubre, fecha en la que pretende estrenarse la obra en La Habana. El dinero será utilizado para cubrir los gastos de escenografía y vestuario, la realización de videoarte y banda sonora, y logística.