Durante los últimos 27 años, Espacio Aglutinador ha abierto camino al arte contemporáneo cubano. Fundada en 1994 por Sandra Ceballos y Ezequiel Suárez, la galería es de las primeras que dio cobijo a los artistas fuera de las instituciones.
Espacio Aglutinador fue creada con logística y planes de perdurar en el tiempo. Hoy la estructura artística independiente cubana ha sido ampliada por proyectos como INSTAR, El Apartamento, Avecez Art Space, entre otros.
Ceballos y Suárez crearon la galería en una época de crisis económica y de carencias espirituales dentro de la sociedad cubana. Desde su fundación, Espacio Aglutinador, que no posee fines comerciales, ha acogido las más variopintas muestras de artistas que buscan expresarse con libertad.
El diapasón temático mostrado en la pequeña casa situada en la calle 25 del Vedado habanero, abarca desde las obras de artistas marginados hasta las de los más introvertidos, que carecen de los mecanismos de mercadeo para promocionar su arte.
El tatuaje, por ejemplo, ha conseguido una aceptación tardía como forma de expresión artística milenaria, pero en los tiempos en que todavía se veía en Cuba como símbolo de marginalidad, ya Sandra Ceballos abría las puertas de Aglutinador a los tatuadores, buscando la legitimación de estos y la aceptación del público.
El sexo, la política, la religión y la denuncia social son tópicos abordados tanto en la obra de Sandra como en las curadurías que se han expuesto durante estos años en Aglutinador.
Esta sala expositiva ha sido testigo de los primeros pasos de creadores que hoy gozan de gran prestigio nacional e internacional. Algunos censurados y excluidos del circuido cultural por las autoridades cubanas han encontrado en Aglutinador espacio para dar a conocer sus obras. Tal es el caso de Ángel Delgado, quien cumplió ocho meses de prisión en 1991 por una performance en la que defecaba sobre un ejemplar del periódico oficial Granma. Tania Bruguera, antes de poseer el renombre internacional de hoy, también dejó su huella en la galería.
En este 27 aniversario está expuesta una fotografía que refleja la obra performática "El Último Chago", de Chago Armada. Según Ceballos, fue como una premonición dado que pocos meses después murió el artista visual.
En Aglutinador se han presentado no solo figuras de la generación de los 80 y los 90, sino que ha ido renovándose con el tiempo y ha visto dar sus primeros pasos a artistas como Hamlet Lavastida o Julio Llópiz, exponentes de una generación más próxima al nuevo milenio, con nuevas concepciones y visiones estéticas respecto al arte, sus temáticas y representaciones.
"Espacio Aglutinador ha sido protector de artistas que han sufrido persecución política en el pasado, de los que la sufren en el presente y de los que la sufrirán en el futuro", ha dicho Lavastida sobre la galería.
Actualmente, pese a las limitantes de la pandemia y las circunstancias sociales, Aglutinador se sigue reinventando y renace para brindar al público un arte que se expresa en libertad.