Back to top
Espeleología

Hay una cueva en Bulgaria desde donde se ven los ojos de Dios

Prohodna es la mayor caverna del país y un paraíso para los aficionados a la espeleología.

Madrid
Vista del interior de Prohodna.
Vista del interior de Prohodna. DESTINOINFINITO.COM

La cueva Prohodna, ubicada en una apartada zona de Bulgaria, es una de las cavernas más famosas no solo de ese país, sino de todo el mundo, debido a un milagro de la naturaleza que ha impresionado por muchos años a toda clase de personas.

Dos enormes agujeros naturales ubicados caprichosamente en la bóveda de la cueva se asemejan a cuencas oculares gigantes vacías, por lo que los residentes locales se refieren a ellos como "Los ojos de Dios", pero también como "Los ojos del diablo".

Ubicada a 112 kilómetros de Sofía, la capital, y muy cerca de la localidad de Karlukovo, en la provincia de Lovech, tiene una longitud de 262 metros, lo que convierte a Prohodna en la caverna más grande de Bulgaria, según refiere el sitio Destino Infinito

Como siempre está abierta a los visitantes, Prohodna es un sitio que posee una ruta especial para turistas, así como rutas deportivas de diversa complejidad. Los fanáticos de los deportes extremos han elegido durante mucho tiempo este lugar para su entrenamiento, pues la ubicación de la cueva promueve la práctica del bungee jumping.

Asimismo, es un paraíso para los aficionados a la espeleología, dado que en la zona hay registrados casi dos centenares y medio de cavernas. 

Viajeros deseosos de contemplar, a falta de estalactitas y estalagmitas, el  espectáculo de las pequeñas cascadas que caen a través de los "ojos" cuando llueve, refieren la maravilla que supone presenciar el fenómeno. Además, otra fantasmagoría es la visión nocturna de la luna a través de dichas aberturas, un momento en el que la creencia popular incita a pedir tres deseos.

El lugar forma parte del Parque Geológico de Iskar-Panega, una de las regiones kársticas más extensas de Bulgaria, y se originó en la Era Cuaternaria.

Los antiguos tracios situaran en tan peculiar escenario uno de sus santuarios, heredando el uso que le daba el hombre prehistórico desde tiempos neolíticos.

Dado que la región donde está ubicada la cueva ha sido sometida durante milenios a la acción kárstica, el agua produjo un paisaje modelado a su antojo, con galerías subterráneas y grutas naturales excavadas durante decenas de siglos que son parte de su peculiar encanto.

Archivado en
Más información

Sin comentarios

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.