Aunque los ladridos de los perros suenan igual en todas las latitudes, los humanos los "han traducido" al lenguaje escrito y hablado a través de diferentes onomatopeyas.
En español comúnmente se usan los términos ¡jau! ¡jau! o ¡guau! ¡guau!, pero en otras lenguas los términos van desde ruff! ruff! (en inglés) hasta au-au (en portugués).
Según la BBC, tampoco los pájaros pían ni lo gallos cantan con las mismas vocales y consonantes en todos los idiomas. De una lengua a otra, las onomatopeyas de un mismo sonido varían de forma insospechada.
A mi siempre me ha llamado la atención en el dialecto en el que ladra Papo Weston.