El piloto de un vuelo de la aerolínea Jet2 se desmayó durante el recorrido de la ciudad inglesa de Manchester a Funchal (Madeira), lo cual provocó una situación crítica entre la tripulación a bordo.
Como solución desesperada, los tripulantes decidieron preguntar por megafonía si algún piloto se encontraba entre los pasajeros.
Casualmente, un profesional de la aviación viajaba en la aeronave para disfrutar de sus vacaciones en Portugal. El hombre, cuya identidad no fue revelada, no dudó en ningún momento en ofrecer sus servicios para ayudar en el aterrizaje de emergencia.
Este tuvo lugar sin ningún tipo de complicaciones en el aeropuerto de Oporto a las 11:00AM. La aerolínea dispuso una nueva tripulación en esa ciudad de Portugal para retomar el viaje y llegar hasta Funchal, ocho horas después de lo esperado, pero en perfecto estado gracias al excelente trabajo del equipo.
Según reportó el diario Daily Mail, un portavoz de Jet2 declaró que "el vuelo de Manchester a Funchal se desvió a Oporto como medida de precaución debido a que uno de los pilotos se sintió mal".
La compañía publicó además un mensaje en su cuenta de la red social Twitter: "Nos gustaría pedir disculpas a los clientes que viajan en el LS765 desde Manchester a Funchal, Madeira, que se ha desviado a Oporto, Portugal, debido a una situación médica a bordo. Estamos trabajando para ponerlo en camino lo antes posible", apuntó el mensaje, que no ofreció detalles acerca de qué pudo provocar el malestar del piloto.
"Hubo un incidente en la cabina y otro piloto de Jet2 que estaba de vacaciones apareció desde la parte trasera del avión. Ofreció sus servicios a la tripulación y entró en la cabina. No salió hasta que ayudó al piloto a bajar del avión cuando aterrizamos", narró Nicholas Banks, un pasajero a bordo que como muchos otros aseguró que la tripulación manejó muy bien la situación.
Todavía no se ha hecho público el estado del piloto, pero según dijo Banks "se lo llevaron en silla de ruedas y con una máscara de oxígeno" al hospital para ser examinado.