El Gobierno quiere hacer en la calle Línea, una de las principales de La Habana y en la que se ubican varios teatros y cines, un corredor cultural que concentre la actividad artística de la ciudad, según un ambicioso proyecto presentado este fin de semana, reporta EFE.
"Es un proyecto de renovación urbana, observado desde el punto de vista de la cultura", dijo la arquitecta cubana Vilma Bartolomé, que lidera el proyecto.
Según la información oficial, la idea es "rescatar el espacio público a lo largo de toda Línea", una vía de más de tres kilómetros en el barrio habanero de Vedado que nace y desemboca en el Malecón.
Estos días la calle Línea es escenario de muestras, actuaciones, instalaciones y otras manifestaciones culturales de la XIII Bienal de La Habana, que se desarrolla hasta el 12 de mayo.
La iniciativa pretende una transformación completa de la calle Línea durante los próximos tres años, con un total de 72 proyectos interconectados.
"Estamos viendo los primeros 30 y empezando a construir los primeros ocho o nueve, explicó a periodistas Bartolomé, que asegura tener financiación de la Unión Europea (recientemente Bruselas aprobó una próxima partida de 15 millones de euros para apoyar proyectos culturales en Cuba) y de autoridades locales.
Se desconoce, no obstante, el importe de esta iniciativa a gran escala: "tenemos asegurado lo de los primeros proyectos. Tenemos que ir avanzando proyecto a proyecto, saber lo que necesitamos en cada uno de los casos y seguir acopiando. Tiene que ser autosustentable en el tiempo", apuntó la arquitecta.
Explicó que en este momento el "corredor Cultural" se encuentra en una primera fase de "lanzamiento de la idea y los primeros proyectos", aunque su ejecución comenzará "en las próximas semanas" para que más adelante "la suma de todos los proyectos genere una gran intervención".
El centro neurálgico del corredor cultural se emplazará sobre los restos de la antigua estación de tranvías (que en el pasado también fue una fábrica de bicicletas) de Línea y 18, un espacio de aproximadamente una hectárea que los organizadores quieren transformar en un gran centro cultural para acoger eventos como ferias de arte y literatura.
El macroproyecto de Línea también incluye la restauración de parques y jardines, así como la renovación de su mobiliario urbano, desde este año en el que las autoridades tratan de dar un lavado de cara a La Habana con motivo del 500 aniversario de su fundación.