Carlos Manuel Travieso salió de Cuba en el año 2010 rumbo a Paraguay. Allí tenía un amigo que lo ayudó con los requisitos migratorios que pedía, en ese entonces, el Gobierno del país. Había estudiado y era maestro emergente "de los buenos", cuenta en la entrevista con DIARIO DE CUBA. Sin embargo, como tantos jóvenes cubanos eligió el camino de la emigración.
"Todos saben la realidad de Cuba y cómo vivimos los jóvenes. Cuando uno tiene sueños y no tiene la posibilidad de cumplirlos en su país, busca otros horizontes".
Travieso trabajó como camarero, luego como modelo para firmas de alta costura, e incluso llegó a ganar el reality show Calle 7.
"Llegué acá y tuve que trabajar de lo que fuera. Como emigrante, a veces no tienes las opciones ni tienes el terreno para escoger en qué quieres trabajar".
Para Travieso esa etapa fue muy importante en su asentamiento en Paraguay: "Salgo a la calle y todo el mundo sabe que hay un cubano por ahí, y eso me ayuda mucho".
Aunque el mundo del espectáculo parecía un buen inicio en un país extranjero para un recién llegado, Travieso decidió romper con él.
"La televisión es bastante despiadada. La gente te ve, se cree con el derecho de opinar sobre tu vida, no sabe la educación que tú tienes, ni de tu familia, ni de dónde vienes", pero "estás expuesto", explica Travieso. "Ese tipo de cosas me afectó en algún momento. También quería sentar mis bases para un futuro como emigrante. Uno tiene que sentar bases porque no toda la vida vas a trabajar en la tele; puede ser que hoy te vaya bien, pero mañana te puede ir mal".
Carlos Manuel Travieso tiene una barba morena muy estilizada. Iba dos veces por semana a hacérsela a un salón. Fue entonces cuando se le ocurrió comprar una barbería, utilizar los contactos que había conseguido en sus días de popularidad y crear un espacio acogedor.
Recientemente trascendió en las redes sociales que en "Los Barberos de López" se desarrolla una iniciativa caritativa. Un indigente, un niño limpia botas y un hombre sin casa fueron atendidos en el establecimiento de manera gratuita. Cada episodio fue grabado y publicado en la cuenta de Twitter del negocio.
"Este tema de beneficiar a las personas que están en la calle es algo que me toca mucho. Como extranjeros, a veces vivimos cosas muy fuertes, lejos de la familia, y este país a mí me abrió las puertas y me trató superbien. Es algo que me hace sentir muy feliz porque estoy devolviendo de alguna manera todo el cariño y todas las cosas buenas que me ha brindado Paraguay".
A la pregunta de si le gustaría poner un negocio como este en Cuba, Travieso responde que sí. "Pero venimos de un Estado que no te da seguridad jurídica; entonces, no puedes poner ningún emprendimiento porque no tienes seguridad", matiza.
"Hay muchas maneras de hacer patria, y patria no es la Revolución. Yo hago patria desde acá. Yo siempre voy a ser cubano y voy amar mi país, pero no estoy a favor de las cosas que están pasando".
Carlos Manuel Travieso es otro joven cubano que tomó el camino de la emigración por falta de oportunidades en la Isla. En la actual crisis migratoria, llegan diariamente a países extranjeros jóvenes altamente calificados. Médicos, ingenieros, maestros, periodistas son capaces de cruzar selvas y fronteras con la esperanza de forjarse, ya no un futuro mejor, simplemente un futuro. Es un país que se desangra por todos lados. ¿Cuántos cubanos como Travieso terminarán haciendo patria en otra geografía?
"A los jóvenes lo que les puedo decir es que no se cansen. Si estás decidido a quedarte en tu país y a tener tus proyectos ahí, también está bien. Yo decidí hacerlo porque en la etapa que yo estaba yo no veía futuro. Los sueños que tenía sabía que no los iba a poder lograr allí".
