Los dos cubanos que estaban varados en la frontera entre Bielorrusia y Lituania, Michael Méndez Vega y Alberto Céspedes Pérez, ya se encuentran a salvo en Rusia, según pudo comprobar DIARIO DE CUBA.
Después de ser detenidos, golpeados y abandonados en dos ocasiones cerca de un río helado de la citada frontera, Céspedes Pérez logró subirse a un pino y marcar un número de emergencia ruso.
"Este servicio de emergencia ruso contactó al lituano y al bielorruso —detalló Céspedes Pérez a esta redacción—. En ese momento, regresamos hacia territorio bielorruso, y cuando llegaron, nos sacaron de ahí de muy mala gana, prácticamente a rastras del pantano ese. No hubo un rescate, ellos no dieron ninguna asistencia. Ellos mismos nos habían dejado ahí".
Posteriormente, los cubanos fueron trasladados en una camioneta militar hasta un punto en una carretera. Allí las autoridades bielorrusas les pidieron un taxi, que ellos mismos tuvieron que pagar, para ir a la terminal de Grodno. Con el poco dinero que les quedaba, los cubanos se hospedaron en un hotel barato durante tres días. El día 20 llegaron a Minsk en tren para abordar el vuelo a Moscú. Céspedes Pérez aclara que ese boleto de avión lo habían sacado por si algo salía mal durante la travesía.
"Nosotros no teníamos donde quedarnos en Moscú —detalla el migrante originario de Las Tunas—. Un cubano nos acogió y nos prestó asistencia. El amigo mío (Méndez Vega) está muy mal, hubo que llevarlo al hospital. Yo estoy también con los pies bastante inflamados (producto de la sobreexposición al frío)."
Hasta el momento en que se redacta esta información, Méndez Vega se encuentra hospitalizado en Moscú, aunque sin peligro para al vida. Céspedes Pérez envió a DIARIO DE CUBA imágenes de sus pies hinchados y ampollados.
"No pensaba que nada de esto pudiera saberse porque yo simplemente hice una publicación a la orilla de un río donde pensé que me iba a morir… y mira el poder que tienen las redes sociales", comenta Céspedes Pérez.
Este hombre aclara que la Embajada de Cuba en Rusia contactó con Méndez Vega en el hospital, pero con él no. "Mi mujer les envió un correo en medio de la situación que nosotros teníamos en el río y nunca le respondieron. Ahora ellos están tratando de cuidar su imagen, pero en realidad no han hecho nada."
La diplomacia del régimen acreditada en Rusia y Bielorrusia no ha informado oficialmente sobre estos sucesos. Tampoco lo ha hecho ningún medio oficial cubano.
Con todo lo que han pasado los pobres, bien se puede preparar un guion para una película de aventuras a la cual llamaría: Dos palestinos en aprietos.