El activista cubano Osmel Adrián Rubio Santos, el más joven de los acuartelados de San Isidro a finales del año 2020, con apenas 17 años, actualmente se encuentra en una situación irregular en Bielorrusia y bajo la constante amenaza de deportación a Cuba.
"El hostigamiento constante que sufrí en mi país por oponerme abiertamente a la dictadura me llevó a tomar la decisión de abandonar Cuba y llegar a Rusia el 4 de agosto de 2021. En ese país estuve ocho meses, cinco de ellos de manera ilegal, con riesgo de deportación constante", cuenta Rubio Santos a DIARIO DE CUBA
"Las autoridades rusas detienen a muchos cubanos y los pueden tener hasta dos años presos a la espera de un avión para deportarlos de manera forzada. Por mi estatus ilegal, era muy difícil encontrar algún trabajo y si lo encontrabas ganabas una miseria que no te alcanza para cubrir tus necesidades más básicas, por eso decidí irme para Bielorrusia", relata este cubano, que ahora tiene 19 años.
Sin embargo, en ese país aliado del régimen de Vladimir Putin y tan autoritario como aquel, el activista tampoco ha encontrado sosiego.
"Como no podía tomar un avión hasta ese país me fui por tierra, al llegar a la frontera las autoridades bielorrusas me dijeron que no aceptaban mi entrada allí. Entonces, hice como que aceptaba esa negativa y cogí otro camino para poder entrar a este país. En la travesía de dos días fui asaltado, me quitaron dinero y ropa, y ahora me encuentro en Minsk, la capital bielorrusa en una situación precaria, viviendo al día y sin saber qué me puede pasar mañana", expresa.
Rubio Santos añade que producto de la travesía tiene los pies hinchados y la boca rajada. Las autoridades bielorrusas, dice, están a la caza de los cubanos con el objetivo de apresarlos y deportarlos.
"Yo solo salgo del lugar donde me encuentro a buscar algo de comida, solo a eso porque tengo miedo a que me deporten ya que aquí estoy ilegal y este país es aliado del Gobierno cubano. Deseo llegar a un lugar seguro, pero en estos momentos no tengo lo medios para conseguirlo y me encuentro muy descompensado porque soy diabético", puntualiza el habanero.
Cuando tenía solo 16 años, Rubios Santos comenzó a visitar la sede de las Damas de Blanco en Lawton y por ello sufrió varias detenciones. Al ser convocado al Servicio Militar Obligatorio, se negó a ir y afirmó en una carta que "si agarraba un arma era para tumbar a la dictadura".
Tras ser sacado de manera violenta de la sede del Movimiento San Isidro el 26 de noviembre de 2020, fue víctima de varios actos de repudio y se vio imposibilitado de salir de su casa en el municipio habanero del Cotorro, por más de un mes, debido a la constante vigilancia policial.
Pienso que tenías mejores opciones con la ruta de los volcanes. Al menos con el idioma.