Una familia cubana con tres niños perdió su vivienda y todos sus bienes este miércoles, en un incendio ocurrido en horas de la mañana en la calle Agramonte entre Benito Anido y Ortiz, en Regla, La Habana.
"Mi esposo y yo habíamos salido de la casa y solo se encontraba mi niño mayor (de 14 años) durmiendo. Cuando sintió el humo, se despertó, vio que no había más nadie en la casa y logró salir por la puerta trasera que colinda con otros vecinos", declaró a DIARIO DE CUBA Elena González, cuyos otros dos hijos tienen tres y 11 años.
"Yo imagino que haya sido una subida de voltaje, pues no había nada en la candela. Fue a partir del contador eléctrico situado en la sala y llegó hasta el final de la casa", dijo González.
Cuando los bomberos llegaron al lugar era demasiado tarde. La familia perdió todas sus pertenencias entre las llamas.
"Representantes del Gobierno que vinieron nos dijeron que la casa estaba para demoler, pero que nos iban a ayudar. Ellos quedaron en venir mañana, también en ir al almacén para ver entre las cosas de donación qué podían darme. Dicen que no había mucho, pero que por lo menos colchones podían a ofrecer", relató la madre.
En estos momentos, los miembros de esta familia se encuentran alojados en casas de vecinos que les han ofrecido apoyo ante la difícil situación que viven y se han brindado para cocinarles mientras hallan una solución.
La activista Daniela Rojo, quien estaba de visita en casa de unas amistades cerca del lugar del suceso, fue la primera en alertar sobre el incendio en las redes sociales y pedir ayuda para esta familia.
Una de las primeras respuestas llegó de Jakob Barceló, uno de los coordinadores del Proyecto Colaborativo Humanitario Cienfuegos Por La Vida, quien al enterarse de lo ocurrido a esta familia comenzó la búsqueda de donaciones.
"Estamos ahora con este caso, expandiendo nuestra ayuda a esta familia. Para ello, estamos gestionando la recaudación y posterior entrega de esa ayuda. Pretendemos hacerlo así con casos puntuales en otras provincias, pero nuestro radio de acción es Cienfuegos", explicó Barceló.
"Le entregué a Elena un total 2.250 pesos y me han contactado muchas personas que quieren ayudar y donar ropa para los niños. Mientras yo estuve ahí, vino una muchacha que me había escrito previamente y le llevo un maletín de ropa", afirmó por su parte Rojo, quien en sus redes sociales publicó una pequeña crónica donde relata el día y cuenta que un restaurante privado de Guanabacoa también se había ofrecido para llevarle comida a esta familia.
En medio de la crisis que atraviesa Cuba, este tipo de desastre es un duro golpe para cualquier familia. Sin embargo, es alentador que muchos cubanos se solidaricen y den algo de lo poco que tienen para ayudar a otros cubanos a salir adelante.