'La invasión consentida': un libro que cuenta 'la sumisión voluntaria' de Venezuela ante Cuba

"La invasión consentida", un libro periodístico publicado bajo el pseudónimo de Diego G. Maldonado, narra lo que para muchos es uno de los fenómenos más peculiares de la política latinoamericana reciente: "la sumisión voluntaria de Venezuela, una nación rica de más de 900.000 kilómetros cuadrados y 30 millones de habitantes, a Cuba, ocho veces más pequeña y tres veces menos poblada", reseñó Infobae.

La autoría del texto se desconoce si es individual o colectiva, pues "a la luz del acoso que los comunicadores sufren en Venezuela, los editores de la obra decidieron mantener el anonimato del autor. Su seguridad y bienestar, igual que la de sus familiares, están en riesgo", se puede leer en el dorso.

La publicación revela que los oficiales cubanos "están presentes en todo el país. En el palacio presidencial, siempre al lado del mandatario; en los ministerios, institutos y empresas estatales. Comparten la administración de los puertos, tienen su propia plataforma de aterrizaje en la rampa presidencial del aeropuerto internacional Simón Bolívar y han penetrado los cuarteles y las bases navales, gracias a un convenio militar secreto, firmado en 2008. Además, están desplegados en todo el territorio nacional, al frente de los principales programas sociales".

"El Gobierno cubano conoce toda la base de datos de los venezolanos. Tiene pleno acceso a la oficina de identificación y migración. Está al tanto de cada transacción civil y mercantil que hacen los venezolanos en los registros y notarías; maneja los software de la administración pública y redes de fibra óptica. Por si fuera poco, tiene un panorama detallado del sistema eléctrico nacional, de la industria petrolera y un ‘mapa muy muy completo’ de las reservas minerales del país", agrega el texto.

De acuerdo con los datos incluidos en la investigación periodística, desde el primer año de Chávez en el Gobierno el país sudamericano superó a España como primer socio comercial de la Isla. En el primer los negocios entre ambos países ascendieron a 912 millones de dólares, pero en el 2006 alcanzaban los 2.460 millones de dólares y llegó a los 13.000 millones en 2010.

Sobre las exportaciones de servicios profesionales, el texto señala que se convirtió "en una mina para Cuba y en su mayor fuente de ingresos", superando incluso al turismo. Además, "la plusvalía era fabulosa. La petrolera estatal llegó a pagar hasta 13.000 dólares mensuales por el trabajo de un médico cubano que apenas recibía 300 dólares como salario. La ganancia superaba los 150.000 dólares anuales por cabeza".

Según la investigación periodística, la cifra de profesionales cubanos que viajaron a Venezuela superó los 220.000, entre los que se cuentan algunos altos funcionarios como "viceministros que se radicaron en el país cual si fueran parte del Gobierno venezolano, asesores de alto nivel como el comandante Ramiro Valdés; militares, escoltas y agentes de inteligencia".

El autor del libro consideró que la relación entre Hugo Chávez y Fidel Castro fue decisiva para que ambos países establecieran una relación tan desigual. "Fidel me hizo el honor —gracias, mi Comandante— de convertirme en hijo suyo, y yo así me siento", dijo el venezolano en 2009.

El libro, que también analiza lo que califica como "la cubanización del Gobierno" venezolano y la inserción de oficiales cubanos dentro de las fuerzas armadas de Venezuela, culmina con la muerte de Chávez en marzo de 2013 debido a un cáncer muy agresivo.