Francisco Sampol, un turista español que entró a Cuba el pasado 8 de marzo, dijo en una entrevista al diario Última Hora que en la Isla vio una realidad ajena al Covid-19.
"Hasta que no llegué a Barajas no hablé con mi madre y alucinaba cuando me decían que te ponían multa por ir por la calle. En Cuba vivíamos otra realidad, nos llamaban 'los españolitos del coronavirus'", expresó Sampol a su regreso a España.
Según cuenta Sampol, quien vive en Mallorca y viajó a la Isla junto a su novia, las llamadas alarmadas de sus familiares por la expansión del nuevo coronavirus fue lo que lo incitó para adelantar el vuelo.
"Allí (en Cuba) no hay internet y comprábamos tarjetas en los hoteles. Cuando encendíamos el móvil, whatsapp se volvía loco. Nuestras familias nos mandaban noticias, algunas buenas, otras malas. Entre nuestras compañeras de viaje se generó miedo y algunas decidieron volver el día 14", señaló.
Los españoles dijeron darse cuenta del alcance de la situación sanitaria cuando fueron a cambiar el billete en Air Europa en La Habana. Allí un coterráneo que trabajaba para la Unión Europea les sugirió que si tenían sentido común salieran ya de la Isla.
"Fuimos a la embajada de España en Cuba. Allí todo funciona por la puerta de atrás, y oficialmente nos dijeron que no pasaba nada, pero un cubano nos dijo que iban a cerrar el aeropuerto de La Habana", comentó Sampol.
El turista relató que, una vez en el aeropuerto cubano, todo el mundo llevaba guantes y mascarillas, y que el avión de regreso a España iba completo.
"Al aterrizar, el piloto nos pidió que permaneciéramos sentados pero la gente se levantó y se pusieron las azafatas a gritar. Y entró un equipo médico anticoronavirus. La gente estaba histérica. Yo pensé que nos quedábamos en cuarentena", concluyó.
Por el momento, las autoridades de la Isla mantienen abiertos los aeropuertos del país y los funcionarios del Turismo invitan a viajar a Cuba.
Este miércoles, el Ministerio de Salud Pública informó del primer fallecido por coronavirus en el país, un turista italiano de 61 años.
El número de contagios confirmados en Cuba asciende a diez y los casos sospechosos son casi 400.
Me parece imperdonable que desde su lado, con internet, con informacion y la realidad delante de si, se atrevan a hacerlo. Si se infectan en cuba, bien merecido por temerarios.
Aunque siempre hay un loco que se atreva a viajar, siempre hay un turista, un cientifico, un periodista buscando el pullitzer que se mete en medio de guerras civiles, desastres y pandemias, mientras el resto de los mortales intentan huir por sus vidas.
Que asuman las consecuencias.