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Opinión

La retirada de Más Médicos: ocho preguntas y cuatro conclusiones

La exportación de servicios médicos por un Estado que es el único empleador y que retiene hasta el 75% del salario de los profesionales es esclavitud moderna.

La Habana

El Gobierno de Cuba clausuró los servicios que durante cinco años prestó a Brasil a través del programa Más Médicos. Las condiciones planteadas por el presidente electo del país sudamericano —someterse a revalidación, viajar con sus familiares y pagarle el salario completo— fueron consideradas inadmisibles, lo que decidió el regreso de los 8.332 galenos a la Isla.

La abrupta decisión conduce a las siguientes ocho preguntas:

1- La revalidación es una práctica de muchos países, pero suponiendo que la intención era poner en duda la preparación de los médicos cubanos, ¿por qué en lugar de retirarlos no se aprovechó la oportunidad de revalidarlos y confirmar ante el mundo su calidad?

2- Si los médicos cubanos están plenamente identificados con los principios revolucionarios, ¿por qué se les somete a separaciones familiares prolongadas, con las consecuencias negativas de tal medida?

3- ¿Por qué es inaceptable que Brasil les pague el salario completo como lo hace a los médicos de otros países en vez de hacerlo a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para que esta lo transfiera al Gobierno cubano, quien se queda con un 75% de lo percibido? 

En el artículo: Las mentiras de La Habana: Cómo ocultó Cuba los salarios de los médicos cubanos en Brasil y cómo se implicó a la OPS, publicado en el DIARIO DE CUBA, se plantea que el envío de médicos cubanos a Brasil comenzó a tratarse en abril de 2012, que la OPS no entró en la negociación hasta diciembre de ese año, que la idea de implicarla fue un subterfugio para evadir al Congreso brasileño, al que habría que haber acudido en caso de acuerdo bilateral y para no inclinar la balanza comercial hacia el lado cubano, cosa que habría sucedido si Brasil pagaba directamente a La Habana por los médicos contratados.

4- ¿Por qué si los médicos son los que mejor conocen las necesidades de aquel país no se les permite que decidan por sí mismos regresar o quedarse, no se les consultó antes de tomar la decisión, ni se les informó antes de hacerla pública?

5- ¿Por qué se califica de "héroes" a los que el Gobierno regresa y de "desertores" a los que deciden continuar brindando sus servicios en Brasil y, además, se les prohíbe regresar a su país durante ocho años? 

6- Si el Gobierno cubano reconoce que la decisión tiene un impacto en el pueblo brasileño, cómo es posible que se tome tal decisión en defensa de la dignidad profesional y humana de los colaboradores —a los que no se les consultó— y que millones de brasileros quedaran sin atención médica, ¿qué es más importante, la dignidad inconsulta o la atención médica a los necesitados?

7- La exportación de servicios profesionales es la principal fuente de ingresos del país, los servicios médicos ocupan el primer lugar y el programa Más Médicos es el principal, cuya clausura implica la pérdida de unos 300 millones de dólares anuales, ¿por qué es más importante "lavar la ofensa" que negociar las condiciones planteadas por Brasil?

8- Si la participación en el Programa permite a los médicos cubanos satisfacer necesidades o aspiraciones imposibles con el salario que reciben en Cuba, y si Brasil en segunda convocatoria pondrá plazas a disposición de médicos cubanos y extranjeros, no resulta difícil deducir que una parte de los cubanos no regresará, lo que representa una considerable pérdida de personal calificado para la Isla. Entonces, ¿cuál es la ventaja o la razón de retirarlos en lugar de negociar?

Un análisis objetivo acerca de tal decisión permite concluir que:

Primero, la exportación de servicios médicos por un Estado que es el único empleador, que tiene prohibido a los galenos salir del país sin permiso, que al ser enviado a una misión sus familiares no pueden acompañarlos, que se les paga el 25% de lo que se cobra por cada uno y que, aunque no se les obliga a ir por la fuerza física, las necesidades los empujan, demuestra que los alquilados no tienen ningún poder de decisión, como acaba de ocurrir con la retirada del programa Más Médicos. Esa política se denomina esclavitud moderna. 

Segundo, que los ingresos de un país no pueden depender estratégicamente de entradas tan frágiles como es el alquiler de profesionales y como lo han demostrado las subvenciones por razones de similitud ideológica.

Tercero, todo lo anterior guarda estrecha relación con la existencia y defensa de un modelo económico, que incapaz de producir ha obligado a vivir de subvenciones, préstamos sin pagar y exportación de servicios profesionales en condiciones de esclavitud moderna.

Cuarto, un análisis riguroso indica la insoslayable necesidad de reformas estructurales profundas que incluyan las libertades ciudadanas, sin las cuales los profesionales seguirán sometidos a esa especie de esclavitud moderna y la economía se hundirá, pues resulta imposible continuar viviendo de subvenciones y exportación de profesionales alquilados; algo que fue soslayado en el Proyecto de Constitución que elaboró el Partido Comunista.

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