La directora del estatal Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), Mariela Castro Espín, rompió el silencio en torno a la polémica del matrimonio igualitario y dijo este viernes que ella no dicta "nada", en referencia al "debate" que ha suscitado el tema ante la reforma constitucional que está dirigiendo el Gobierno.
No impongo ni dicto nada, solo promuevo derechos desde la reflexión y el análisis, desde mi responsabilidad social como directora de una institución científica que entre sus funciones tiene la de promover los derechos sexuales de todas las personas #Cuba #LGBTI
— Mariela Castro Espin (@CastroEspinM) 28 de septiembre de 2018
"No impongo ni dicto nada, solo promuevo derechos desde la reflexión y el análisis, desde mi responsabilidad social como directora de una institución científica que entre sus funciones tiene la de promover los derechos sexuales de todas las personas", escribió Castro Espín en su cuenta en la red social Twitter.
El Proyecto de Constitución, que se encuentra en fase de "consulta popular", cambia la definición del matrimonio como "la unión entre dos personas con capacidad legal para ello". La actual Ley de leyes, vigente desde 1976, expone este concepto como "la unión entre un hombre y una mujer".
De aprobarse la nueva definición, las autoridades podrían proclamar una ley que favorezca las uniones entre personas del mismo sexo, una de las principales demandas de la comunidad LGBTI de la Isla, donde en la década de 1960 se perseguía con dureza a los homosexuales bajo el paraguas de Fidel Castro.
El gobierno cubano ha demostrado su voluntad política de avanzar en su agenda de derechos humanos pero el oscurantismo, fanatismo y dogmatismo pretende imponer y dictar viejas reglas #Cuba #LGBTI
— Mariela Castro Espin (@CastroEspinM) 28 de septiembre de 2018
Para Castro Espín, "el Gobierno cubano ha demostrado su voluntad política de avanzar en su agenda de derechos humanos, pero el oscurantismo, fanatismo y dogmatismo pretende imponer y dictar viejas reglas".
La diputada, que no hizo alusión directa al origen de tales posiciones, también manifestó que confía "en la sabiduría del pueblo cubano", con cuya "voz directa se está enriqueciendo el proceso constitucional".
Yo confío en la sabiduría del pueblo cubano #cenesex #derechoslgbt #cuba#constitucion
— Mariela Castro Espin (@CastroEspinM) 28 de septiembre de 2018
La Iglesia Católica así como una veintena de congregaciones cristianas se han pronunciado en contra de este cambio constitucional y algunas de ellas están promoviendo campañas en favor de lo que consideran el "diseño original" de la familia.
Castro Espín defendió en otro de sus tuits que existen "numerosos estudios científicos que dan cuenta de la evolución de las familias en la historia y sobre cómo esta institución social, al igual que la del matrimonio, ha sido sometida al control social en los juegos de poder de las clases dominantes".
El concepto de familia que llaman tradicional o natural no fue asumido pacíficamente, fue impuesto con sangre, tortura, persecución, genocidios de pueblos enteros que fueron estigmatizados como herejes y muchas mujeres condenadas por “brujas” #Cuba #LGBTI
— Mariela Castro Espin (@CastroEspinM) 28 de septiembre de 2018
"El concepto de familia que llaman tradicional o natural no fue asumido pacíficamente, fue impuesto con sangre, tortura, persecución, genocidios de pueblos enteros que fueron estigmatizados como herejes y muchas mujeres condenadas por brujas", aseveró.
La comunidad LGTBI se ha mostrado esperanzada ante la posibilidad de redefinir el concepto de matrimonio y ha "contraatacado" a las posiciones de las denominaciones religiosas cubanas con una campaña que defiende "un diseño de familia muy original".