La Fiscalía de La Habana pide entre 20 y seis años de cárcel por "sabotaje" y "robo con fuerza" para cuatro jóvenes que presuntamente asaltaron y luego quemaron la bodega La Lira, en el empobrecido barrio habanero de Mantilla (Arroyo Naranjo).
El juicio tendrá lugar este jueves en el Tribunal Provincial de La Habana y los familiares son pesimistas en cuanto al posible resultado.
"Los van a sancionar como si fueran contrarrevolucionarios o gente de los derechos humanos. Ellos declararon que intentaron darle candela a la bodega para no dejar rastros, pero no estaban haciendo sabotaje", dijo bajo condición de anonimato la madre de uno de los acusados.
La Fiscalía indica en su acusación que las investigaciones fueron realizadas por el Órgano de Instrucción del Departamento de la Seguridad de Estado.
Solicita para Jorge Eduardo Echeverría Barro, de 26 años de edad, 20 años de cárcel (12 por sabotaje y ocho por robo con fuerza), y reparar el daño material causado al Estado, valorado 42.791 pesos (unos 1.711 dólares).
Asimismo, pide para Yulexis Francisco Manrique Arrebato, de 35 años de edad, 18 años de prisión también por sabotaje y robo con fuerza.
Para los otros dos acusados, Yan Carlos Estrada Montero y Yusniel Rubén Barrueta Vergara, de 18 y 22 años de edad, respectivamente, la Fiscalía solicita seis años de privación de libertad por robo con fuerza.
"Mientras duro la investigación, todo fue un infierno. Estuvieron más de cuatro meses en 100 y Aldabo (temido centro de instrucción criminal). Las visitas eran ante un oficial del Ministerio del Interior (MININT). Ahora veremos qué pasa con estos muchachos en el juicio", dijo un familiar de Yan Calos.
Desde el suceso, ocurrido el 11 de diciembre del 2017, los acusados tienen impuesta la medida cautelar de prisión provisional, dijeron tres familiares contactados por DIARIO DE CUBA.
Según la Fiscalía, los acusados se llevaron de la bodega —dedicada a la distribución de productos del sistema de racionamiento— 63 libras de aceite comestible, dos bolsas con 359 paquetes de café, 126 compotas, dos ruedas de cigarros criollos y la suma en efectivo de 350 pesos cubanos.
En total, esos productos son valorados en 2.127,80 pesos (unos 85 dólares).
El reporte de los peritos indica que, como consecuencia del incendio, fueron destruidas o dañadas 4.435 libras de arroz, 374 libras de frijol, 699 libras de azúcar refino, 637 libras de azúcar crudo, 169 libras de aceite, 35 paquetes de sal, 126 compotas, 708 cajetillas de cigarros y 1.597 libras de chícharo.
El documento de la Fiscalía señala que Yulexis Francisco y Jorge Eduardo —con el propósito de borrar la existencia de evidencias que los vincularan con los hechos— arrojaron dos botellas de keroseno sobre los estantes de madera de la bodega y les prendieron fuego.
Esa afirmación, consideraron familiares, "pone en duda que la intención haya sido propiamente realizar un acto de sabotaje".
Según la Fiscalía, entre lo sustraído y los daños del fuego se generó la afectación global a la bodega de 42.791 pesos (unos 1.711 dólares).
Tras el incendio, la bodega demoró tres meses en volver a prestar servicios a la población de la zona.