El diplomático marroquí Boughaleb El Attar presentó este viernes credenciales a Miguel Díaz-Canel y se convirtió en el primer embajador del país africano en la Isla desde que ambos gobiernos rompieron relaciones en 1980, reporta EFE.
El Attar mostró su acreditación junto con los nuevos jefes de misión de otros ocho países —Eslovaquia, India, Jamaica, Kenia, Laos, Mozambique, Panamá y Portugal— en una ceremonia múltiple en la Plaza de la Revolución de La Habana, informó la estatal Agencia Cubana de Noticias.
El nombramiento del embajador marroquí en la Isla llega después de que en abril del año pasado los jefes de misión de ambos países en la ONU firmaran un acuerdo para restablecer relaciones diplomáticas tras 37 años de ruptura.
El rey Mohamed VI ordenó entonces la apertura de una embajada marroquí en La Habana, una de las pocas capitales latinoamericanas donde su país no tenía representación.
Poco antes, el monarca había pasado unos días en Cuba de vacaciones junto a su familia, en una visita privada de la que no se difundieron imágenes.
Las relaciones entre ambos estados estaban rotas desde 1980 por decisión del Gobierno de Rabat, como respuesta al reconocimiento de La Habana la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
El Gobierno cubano mantiene esos vínculos y califica de "justa" la "causa del pueblo y el Gobierno" de la RASD, que reivindica la independencia de la antigua colonia española del Sahara Occidental, cuyo territorio ocupa Marruecos.
La Habana mantiene colaboración con las autoridades del Frente Polisario —movimiento de liberación nacional del Sahara Occidental— en áreas como la salud y educación, con médicos y maestros en los campamentos de refugiados saharauis, además de otorgar becas a jóvenes saharauis para que estudien en la Isla.