El monopolio estatal de las Telecomunicaciones (ETECSA) dio permiso para vender su carísimo servicio Nauta Hogar para la navegación en internet en Matanzas a partir de este miércoles, según dio a conocer el semanario oficial Girón.
La comercialización comenzó este miércoles en el municipio cabecera de Matanzas, en Varadero y en Cárdenas.
La habilitación del servicio de internet cuesta 10 CUC, el módem inalámbrico 23 CUC y el terminal de conexión 1.50 CUC.
La oferta, además, está compuesta por una cuota de habilitación que se abona una sola vez, y una cuota mensual cuyo precio, a partir de 15 CUC, depende de la velocidad que se contrate por 30 horas de servicio al mes.
Todo ello estará asociado a una cuenta de acceso Nauta con dominio @nauta.com.cu.
En cuanto a las especificaciones técnicas, el cliente debe poseer computadora de escritorio o laptop, un teléfono fijo con el par en condiciones de asumir el enlace para la trasmisión de datos, y adquirir el módem ADSL y accesorios para la configuración, que también vende ETECSA.
Actualmente, la empresa estatal ofrece a través de Nauta Hogar velocidades de conexión de un megabit (1.024 Kbps) de bajada y 256 Kbps de subida, a un monto de 15 CUC mensuales, con solo 30 horas de consumo por usuario al mes que, pese al costo, no son acumulativas, se pierden al terminar el período.
Aunque ha cuadruplicado la velocidad de bajada y duplicado la de subida (antes eran de 256/128 Kbps, respectivamente), la oferta es muy pobre, comparada con el servicio de internet en buena parte del mundo.
A un mayor precio vende otros paquetes, como el de 2.048/256 Kbps (por 30 CUC), 3.072/512 Kbps (50 CUC) y 4.096/512 Kbps (70 CUC), igualmente por 30 horas al mes, desproporcionados con respecto a los que se ofrecen hoy en el mundo y en un país donde, según datos oficiales, el salario promedio es no mayor de 30 dólares mensuales.
Según datos oficiales, el salario medio de un cubano no supera los 30 CUC (dólares) mensuales.
La compañía estatal dice que su voluntad "es llevar el proceso de informatización de la sociedad a la mayor cantidad de personas naturales posibles", pero los precios, la baja velocidad y calidad del servicio, y la práctica de limitar el acceso a sitios críticos del Gobierno, como DIARIO DE CUBA, ponen en duda esa afirmación. Más bien, apuntan a un intento de sortear las constantes críticas internacionales sin perder el control sobre la información que reciben los cubanos.