El Gobierno ha incluido la vacuna contra la peste porcina básica (PPC) o cólera porcino en el cuadro básico de medicamentos veterinarios y comenzará a producirla para su uso general el próximo año, informaron este viernes medios oficiales citados por EFE.
La vacuna Porvac ha sido desarrollada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de La Habana y su filial en Camagüey.
Después de los "excelentes resultados" de los ensayos clínicos, el fármaco ya ha sido registrado en el Departamento de Salud Animal del Ministerio de Agricultura (MINAG) y el próximo año comenzará a producirse en Camagüey para su comercialización.
La inscripción en ese registro permitirá que el uso de Porvac se generalice en la práctica veterinaria habitual, informó el director de Investigación Agropecuarias del MINAG, Mario Pablo Estrada, en declaraciones a la oficial Agencia Cubana de Noticias.
Estrada explicó que la vacuna cubana se obtuvo a partir de la combinación de una proteína del virus de la PPC con otra del sistema inmunológico de los cerdos, características que la hacen "más segura que las típicas vacunas de virus atenuado, las más usadas a nivel mundial".
La vacuna se ha probado en un ensayo clínico realizado en el Centro de Investigación en Sanidad Animal de Barcelona, (CRESA por sus siglas en catalán), referente internacional en estudios sobre PPC, que confirmó que además la vacuna erradica la transmisión vertical del virus.
Otras vacunas en el mercado no habían logrado evitar la transmisión de las madres a las crías a través de la placenta, lo cual le concede a Porvac un "alto valor agregado", más si se tiene en cuenta que la PPC es una de las enfermedades que más daños ocasiona en la industria porcina mundial.
Inicialmente, según dicen las autoridades, se prevé producir durante 2018 hasta un millón de dosis de la vacuna para su introducción en la industria nacional, en función de las capacidad actual de ese centro.
Porvac se inscribe dentro de un programa de control y erradicación de esta enfermedad viral extremadamente contagiosa, cuya aparición conlleva al sacrificio de todo el ganado, un problema de especial importancia para la Isla, donde la carne de cerdo es la más consumida por la población debido a las restricciones gubernamentales en cuanto al sacrificio de ganado vacuno.
De acuerdo con datos oficiales, la masa porcina cubana oscila en unos cinco millones de cabezas al año.