La empresa mixta cubano-holandesa Unilever Suchel SA ha introducido en el mercado de la Isla nuevos productos de cuidado personal e higiene del hogar, que importa mientras se termina de construir su anunciada fábrica en la Zona Especial de Desarrollo de Mariel (ZEDM).
Según recoge la estatal Agencia Cubana de Noticias (ACN), las obras podrían no estar terminadas para fines de este año, fecha prevista para su conclusión inicialmente.
Liz Martínez Delgado, especialista en Mercadotecnia de esa firma, dijo que desde el pasado julio comenzaron a incorporar en las tiendas surtidos de las marcas Lux, Sedal, Close Up y Omo, a partir de un permiso especial obtenido para importarlos hasta que finalice el montaje de la planta y puedan ser producidos en la Isla.
Tras cuatro años de ausencia y en alianza con la entidad estatal Intersuchel SA, la multinacional anglo-holandesa Unilever retornó al mercado cubano con un proyecto —emprendido en la ZEDM en noviembre de 2016 bajo autorización del Gobierno— para instalar una fábrica de productos de cuidado personal e higiene del hogar, y asumir además su comercialización mayorista en Cuba.
La compañía, que estuvo presente en la Isla desde 1994 y la abandonó en 2012, suministra la línea de jabones Lux y Rexona Antibacterial, los desodorantes Rexona, las pastas y geles dentales Close Up y Pepsodent, y variedades del champú Sedal.
Martínez Delgado dijo que en el caso de aseo del hogar, en las cadenas estatales TRD, Cimex y Caracol se encuentran también detergentes marca Omo y Surf, y para lavar la ropa el jabón Puro y el suavizante Confort, incorporado hace poco.
Presente en la XXXV Feria Internacional de La Habana con un stand ubicado en el pabellón cubano, Unilever Suchel SA promocionó una nueva entrega para el mercado interno, Sedal Keratina con antioxidante, de uso en la limpieza del cabello.
La multinacional holandesa Unilever constituye una de las compañías líderes en alimentos, cuidado personal y limpieza del hogar con una cifra superior a las 400 marcas y ventas en unos 190 países por valor de unos 54.410 millones de dólares anuales.
En su proyecto en la Isla aporta el 60% del capital, mientras la estatal Intersuchel asume el 40%.
Cuando anunció su regreso a Cuba, el presidente de Unilever México y Caribe, Fabio Prado, dijo que estaban "muy satisfechos" de volver y afirmó que el propósito de la compañía era "estimular la economía" en la Isla con la creación de 300 empleos directos y la introducción en el mercado cubano de marcas de renombre internacional.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) envió en aquel entonces una carta al presidente de la compañía holandesa en España, Antonio Casanova, en la que advertía sobre las condiciones de contratación de los trabajadores por parte del Gobierno cubano, que según la organización "violan sistemáticamente los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo" de la cual La Habana es signatario.
A sus cuatro años de creada, la ZEDM cuenta con 31 usuarios y solo diez de ellos han comenzado sus operaciones, según admitió a la ACN, Ana Teresa Igarza, directora general de esa área estratégica del Gobierno. Espera que en 2018 funcionen allí otras cuatro plantas, además de la fábrica de Unilever.