Las relaciones diplomáticas entre los gobiernos de España y Venezuela viven desde este fin de semana un momento de tensiones e intercambios, toda vez que, luego de la llegada a Madrid de Edmundo González Urrutia, luego de que la Moncloa le ofreciera asilo político, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, reveló que, entre ambos ejecutivos, "ha habido amplias conversaciones y contactos", algo que contradice las declaraciones del ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, quien negó cualquier conversación al respecto y afirmó que solo hubo "contactos operativos" para facilitar la salida del líder opositor en el avión español.
"La falsaria no es buena consejera. Amplias conversaciones y contactos tuvieron lugar para operativizar la partida del opositor González Urrutia del país con las plenas garantías que ofrece un salvoconducto, producto del acuerdo entre ambos gobiernos. Es un hecho comunicacional el aterrizaje de una aeronave de la Fuerza Área española con autorización de las autoridades aeronáuticas de Venezuela", afirmó Rodríguez en su canal de Telegram.
Las palabras de Rodríguez contradicen lo declarado este domingo por Albares, quien subrayó que "no ha habido ningún tipo de negociación política entre el Gobierno de España y el Gobierno de Venezuela" y que la solicitud de asilo político ha sido una decisión "personal" de González. "El Gobierno de España no da ninguna contrapartida para que se haya podido producir esa salida de Edmundo González", agregó.
En tal sentido, Albares dijo, en declaraciones a la cadena radial Onda Cero, que ofreció a González Urrutia quedarse indefinidamente refugiado en la residencia del embajador español en Caracas, Ramón Santos, y que fue este quien decidió exiliarse en España por razones de seguridad. "Le dije que si él quería continuar en Venezuela podía seguir en la residencia del embajador de España tanto como quisiera", afirmó el ministro.
Por su parte, el líder del Partido Popular (PP), principal fuerza de la oposición en España, dijo este lunes en una entrevista televisiva que "Traer a Edmundo González Urrutia y nada más no es defender la democracia. Es arreglar un problema a una dictadura. Si fuera presidente, España reconocería al presidente electo de Venezuela y respaldaría la denuncia a Maduro ante la Corte Penal Internacional, como los presidentes González, Aznar y Rajoy".
Dicha denuncia fue rubricada el viernes 6 de septiembre por una treintena de exmandatarios iberoamericanos, incluyendo a todos los expresidentes de España menos José Luis Rodríguez Zapatero. En ella, pidieron "la captura y detención inmediata" de Nicolás Maduro, de su número dos, Diosdado Cabello, y de toda la cadena de mando chavista.
Asimismo, este martes, el Congreso español llevará a votación una iniciativa del PP sobre las elecciones presidenciales en Venezuela. Con ella, busca que España reconozca a González Urrutia como ganador y nuevo presidente del país, así como que el órgano legislativo condene la represión del régimen de Nicolás Maduro y repruebe el silencio al respecto del expresidente socialista Rodríguez Zapatero, quien ha participado en tareas de mediación entre Gobierno y oposición, y según publicaron diversos medios españoles, fue una pieza clave para la salida de Venezuela de González Urrutia.
Para presentar esta proposición no de ley, el PP señaló que, "según las actas presentadas por las fuerzas democráticas y avaladas por instancias internacionales, el candidato Edmundo González obtuvo 7.303.480 votos (el 67% del total), lo que refleja el deseo inequívoco del pueblo venezolano de un cambio en la conducción del país: de la dictadura a la democracia, de la servidumbre a la libertad".
Por esta razón, el partido de la derecha española considera que es una "obligación política y moral" que el Gobierno reconozca al líder de la oposición como el "presidente electo y legítimo" de Venezuela. "Es un acto de justicia y de respeto a la verdad", indicó el PP.
Por otra parte, el partido Sumar, que forma parte del Gobierno de coalición que lideran el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el presidente Pedro Sánchez, destacó que "la concesión de asilo a Edmundo González no supone reconocimiento de ningún resultado electoral no observado internacionalmente". Además, la líder del partido de izquierda Unidas Podemos, Ione Belarra, criticó en su perfil de X la concesión del asilo a líder opositor venezolano y lo calificó de "ultraderechista", por lo que las opiniones en el seno de las fuerzas democráticas de España, sobre todo al interior del Ejecutivo, parecen divididas en relación al debate que acogerá este martes el Congreso.
