La decimocuarta elección presidencial de Irán irá a una segunda vuelta, ya que ni Masoud Pezeshkian ni Saeed Jalili, los principales contendientes, alcanzaron el 50% de los votos necesarios para ser electos en la primera ronda, informó el portavoz de la comisión electoral del país, Mohsen Eslami.
Según las normas electorales de esa nación, si ningún candidato obtiene la mayoría absoluta, la segunda vuelta se celebrará el 5 de julio. Esta situación ha ocurrido solo una vez en los 45 años de historia de la República Islámica, en 2005, puntualizó la AFP.
Los comicios estaban originalmente programados para 2025, pero se adelantaron debido a la muerte del presidente Ebrahim Raisi, quien pereció en un accidente de helicóptero el pasado 19 de mayo.
El candidato reformista Masud Pezeshkian y el ultraconservador Said Jalili encabezan las intenciones de voto en el país.
Según cifras oficiales, de las 14,07 millones de papeletas escrutadas a las 9:00PM, hora de Teherán, el diputado Masud Pezeshkian obtuvo 5,96 millones de sufragios, y Said Jalili, que participó en las negociaciones internacionales sobre el programa nuclear iraní, 5,56 millones.
Ambos se situaron muy por delante del presidente conservador del Parlamento, Mohamad Baquer Ghalibaf, con 1,89 millones de votos, y del cuarto candidato, Mostafa Pourmohammadi, el único religioso en liza, con casi 112.000 sufragios.
Estos comicios acaparan la atención a nivel internacional puesto que Irán, un peso pesado en Oriente Medio, está en el centro de varias crisis, desde la guerra en Gaza hasta la cuestión de su programa nuclear.
La Comisión Electoral iraní informó que aunque 61 millones de electores estaban llamados a las urnas, el país registró la participación más baja en unas elecciones desde 1979.
De acuerdo con el reporte de EFE, solo un 40% de los votantes que acudieron a las urnas en las pasadas presidenciales ejercieron ese derecho ahora.