El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves una declaración reconociendo la soberanía de Marruecos sobre el Sahara Occidental y anunció la normalización de las relaciones diplomáticas entre Marruecos e Israel.
La Casa Blanca señaló que la decisión de reconocerle a Marruecos su soberanía sobre el Sahara Occidental, un territorio en disputa entre Rabat y el Frente Polisario, forma parte del acuerdo para el restablecimiento de los lazos entre Marruecos e Israel.
"Otro logro histórico hoy. Nuestros dos grandes amigos Israel y el reino de Marruecos han acordado (establecer) relaciones diplomáticas plenas, un enorme avance por la paz en Medio Oriente", manifestó el mandatario en Twitter.
Marruecos se convierte así en el cuarto país musulmán que acuerda normalizar sus relaciones con Israel en los últimos meses, después de Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Sudán, recordó la BBC.
Por su parte, el representante del Frente Polisario ante Naciones Unidas, Sidi Omar, señaló en Twitter que el estatuto legal del Sahara Occidental lo determinan la legislación internacional y las resoluciones de la ONU.
"El régimen de Marruecos está dispuesto a vender su alma con tal de mantener su ocupación ilegal de partes del Sahara Occidental", escribió Omar.
Por su parte, el representante saharaui ante la Unión Europea, Oubi Bachir, subrayó que la resolución firmada por el mandatario norteamericano no cambia la naturaleza jurídica e histórica del Sahara Occidental y advirtió que la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) intensificará su lucha en favor de la independencia, reportó EFE.
El anuncio de Trump, que ha sido igualmente rechazado por la ONU, se produce en un momento de alta tensión bélica en la zona, agitada por la incursión de las tropas marroquíes en el paso fronterizo de Guerguerat, una zona desmilitarizada que separa Mauritania de las zonas ocupadas por Marruecos.
Las tropas marroquíes entraron para expulsar a un grupo de civiles saharauis que bloqueaban la pista de tierra que Rabat y Nuakchot habían convertido en una ruta comercial, sin que los observadores de la ONU desplegados en la zona intervinieran.
La incursión causó que el Frente Polisario considerara que Marruecos había roto el acuerdo de alto el fuego suscrito en 1991 y declarara el estado de guerra en todo el territorio.
Desde entonces, el Polisario asegura que ataca a diario posiciones del ejército marroquí a lo largo del muro de separación que construyó en el desierto, y que ha causado bajas mortales al enemigo, algo que Marruecos primero negó y desde hace semanas evita comentar.
Las aseveraciones de ambos contendientes no puede ser confirmadas ni desmentidas por fuentes independientes, ya que las dos partes impiden el acceso a la zona en conflicto.
La decisión de Trump supone la coronación de la estrategia diplomática iniciada por Marruecos en la última conferencia de paz celebrada en Ginebra, en la que advirtió de que ya no aceptaba el referéndum de autodeterminación pactado en 1991 y que a partir de ese momento solo estaba dispuesto a conceder lo que denomina "una amplia autonomía".
También coloca en una difícil situación a la misión de la Naciones Unidas para el referéndum del Sahara Occidental (MINURSO), criticada por los saharauis por su falta de acción y por el hecho de que desde hace meses no tenga a un representante, lo que según el Frente Polisario "ha servido para que Marruecos haya avanzado en su política de confrontación".
Zona de disputa histórica
El Sahara Occidental es un área escasamente poblada, en su mayoría desértica, situada en la costa noroeste de África.
Antigua colonia española, fue anexionada por Marruecos en 1975. Desde entonces ha sido objeto de una larga disputa territorial entre este país africano y el pueblo saharaui, liderado por el Frente Polisario que cuenta con el apoyo de Argelia y Cuba, entre otros países.
En su mensaje este jueves sobre el Sahara Occidental, Trump consideró que "la propuesta de autonomía seria y creíble de Marruecos es la única base para una solución justa y perdurable para la paz y prosperidad duradera".
"Marruecos reconoció a Estados Unidos en 1777. Es, por tanto, apropiado que nosotros reconozcamos su soberanía sobre el Sahara Occidental", agregó en Twitter.
La República Árabe Saharaui Democrática, declarada por el Frente Polisario en 1976, fue reconocida por muchos gobiernos y es miembro de pleno derecho de la Unión Africana.
Sin embargo, Marruecos califica de "artificial" este conflicto y considera el Sahara como parte integral de su territorio.
Naciones Unidas describe esos casi 270.000 kilómetros cuadrados como un territorio no autogobernado, pero reconoce su derecho a llevar a cabo un referéndum de autodeterminación, que hasta la fecha no ha podido realizarse.
Por su lado, el acuerdo entre Marruecos e Israel contempla el establecimiento de relaciones diplomáticas plenas y el reinicio de los contactos oficiales, así como permisos de sobrevuelo y el establecimiento de vuelos directos entre ambos países.
"Van a reabrir las oficinas de contacto en Rabat y Tel Aviv inmediatamente con la intención de abrir Embajadas. Y van a promover la cooperación económica entre empresas israelíes y marroquíes", dijo Jared Kushner, yerno de Trump y uno de sus principales asesores en la Casa Blanca, en declaraciones a Reuters.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, celebró el acuerdo de establecimiento de lazos con Marruecos. "Actuaremos lo más rápido posible para establecer relaciones diplomáticas plenas", apuntó.
Durante décadas, casi todos los países árabes, con la excepción de Egipto y Jordania, se han negado a mantener relaciones formales con Israel, en un intento de presionar a favor de la causa del pueblo palestino.
Sin embargo, con el impulso del Gobierno de Trump, Marruecos se convierte en el cuarto país árabe que en los últimos meses decide normalizar relaciones diplomáticas con Israel, algo que ha sido duramente criticado por el liderazgo palestino.
Este jueves, el movimiento islamista Hamás, que controla la Franja de Gaza, fustigó con dureza la decisión de las autoridades marroquíes.
"Es un pecado político que no sirve a la causa palestina y que estimula la ocupación para que siga negando los derechos de nuestro pueblo", dijo el portavoz de Hamás, Hazem Qassem, a la agencia AFP.
El pasado 29 de noviembre, con motivo de la celebración del día internacional de solidaridad con el pueblo palestino, hubo una manifestación en Rabat en contra de la posibilidad de que Marruecos normalizara sus relaciones con Israel.