En el sexto día de la huelga de hambre de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) contra el recrudecimiento de la represión y el cerco policial a la sede la organización en Santiago de Cuba, ya son 59 los cubanos que se han unido a la protesta.
"Ya somos 59 cubanos en #HuelgaDeHambreContraRepresión. 54 en #Cuba, dos en #Suiza, dos en #EEUU y uno en #Colombia", informó Ferrer en su cuenta en Twitter.
Dijo que durante el miércoles se incorporaron activistas en Majibacoa, Las Tunas, y también de Cienfuegos.
Asimismo, denunció que durante la tarde se llevaron detenido al huelguista Iam Gamez Gell, en Santiago de Cuba, por segunda vez. Gamez lleva cinco días en huelga de hambre.
Desde Guantánamo, Bartolo Cantillo Romero dijo que el activista Yoandry Matos Guindo, también en huelga, fue arrestado.
Ferrer García hizo una defensa de la huelga de hambre como recurso de protesta.
"Agradezco a los amigos que están muy preocupados por nuestra salud, pero no estoy de acuerdo con quienes dicen que con huelga de hambre no se resuelve nada. La historia demuestra que se puede conseguir mucho. Con lo que sí no se consigue nada es con la inacción, con el miedo...", dijo.
El movimiento opositor femenino de las Damas de Blanco ofreció su apoyo a Ferrer García en su protesta.
"Nos solidarizamos con el líder @jdanielferrer, familia y activistas, con lo que está sucediendo en la sede de la UNPACU en Santiago de Cuba y condenamos al régimen cubano por la violencia ordenada y dirigida contra los activistas y personas que van allí", denunció el grupo en su cuenta en Twitter.
Los activistas en huelga de hambre han recibido apoyo también de Human Rights Watch, el senador cubanoamericano Marco Rubio, el líder opositor venezolano Juan Guaidó, el artivista Luis Manuel Otero Alcántara, entre otros.
En declaraciones a DIARIO DE CUBA, José Daniel Ferrer dijo que se mantendrán en huelga de hambre hasta que el régimen ponga fin a las detenciones de activistas y al cerco sobre la sede.
"No nos interesa si ellos quieren vivir en nuestras esquinas y alrededor de nuestras sedes. Es problema de ellos. Pero lo que sí exigimos es que cesen de inmediato las detenciones arbitrarias, tanto de los activistas que vienen a desarrollar diversas labores a la sede central de la organización, como de las personas que viven en condiciones de extrema pobreza que vienen en busca de apoyo, alimentos atención médica, y otros servicios que acá les damos", señaló Ferrer.
"Si quieren seguir gastando el presupuesto de la nación, del pueblo, eso es problema de ellos, hasta que el pueblo decida gritar bien fuerte basta, pero mientras luchamos para que eso suceda no vamos a permitir que sigan cercando nuestra sede principal y actuando como si estuviésemos en una zona de guerra", añadió.
