Las acciones contra el Decreto Ley 349 "no van a parar", aseguró este domingo a DIARIO DE CUBA el artista plástico Luis Manuel Otero Alcántara, uno de los detenidos el sábado por intentar realizar un concierto en rechazo a la normativa.
El concierto era parte de la campaña "No al Decreto Ley 349", de la cual Otero Alcántara es uno de los principales impulsores.
"Mientras exista el decreto, vamos a estar atacándolo nos cueste lo que nos cueste, hasta que lo quiten", dijo Otero Alcántara, cuyas propuestas desde el arte, a las que se han sumado varios creadores independientes, se han convertido en un importante desafío para el Gobierno.
Para impedir el concierto, llamado "Sin permiso del 349", la Seguridad del Estado montó un operativo alrededor del la vivienda de Otero Alcántara, donde iba a desarrollarse; detuvo al artista y a su pareja, la historiadora del arte Yanelys Núñez Leyva y, más tarde, a los creadores que habían acudido al lugar. Varios de ellos fueron golpeados.
"A Amaury Pacheco lo golpearon fortísimo y a Soandry del Río también. De hecho ahora mismo tienen problemas con la cervical", dijo Otero Alcántara.
A su juicio, los agentes del régimen están "preocupados por que se arme una situación similar a la de Nicaragua".
"La situación estuvo muy tensa después de que nos llevaron detenidos, por la respuesta popular de la gente", comentó.
Vídeos subidos a las redes sociales mostraron a vecinos de La Habana Vieja, donde reside Otero Alcántara, gritando a los policías y calificando de "abuso" el arresto de los artistas.
DIARIO DE CUBA habló con varios residentes en la zona. La mayoría pidió mantenerse en el anonimato.
Siempre "pasa lo mismo con el pelú de la esquina", dijo una vecina de Otero Alcántara. "La ultima vez lo cogieron preso por intentar embarrarse de mierda. Yo no sabía que por eso te cogían preso. La tienen cogida con el muchacho que, al final, no le hace daño a nadie. Siempre lo detienen por una bobería distinta".
Un vecino que vive en la misma calle del artista (Damas entre San Isidro y Desamparados) se preguntó "por qué le forman eso (operativos policiales) a esa gente".
"Al final, las únicas fiestas del barrio que terminan tranquilas son las de allí. No veo nunca policías en las fiestas del parque, donde siempre hay alguna bronca", criticó.
"La Policía es la que se está buscando que le calienten el barrio", advirtió otro vecino. "Si lo único que querían era cantar su música (…) no veo el problema".
"Imagínate, el barrio lleno de policías", comentó una residente. "Ni que uno les tuviera cariño".
"Para esto sí hay policías, pero cuando matan a uno a las 4:00 de la mañana aquí no está ni el Tato", se quejó.
Todos los artistas han sido ya liberados. La represión contra ellos coincidió el fin de semana con represalias a activistas contra la discriminación racial que realizan proyectos culturales en barrios pobres de la capital.
"Tienen mucho temor. La situación en Cuba está cada día más precaria, cada día hay más carencias, son más las diferencias de todo tipo" dentro de la sociedad, consideró Otero Alcántara. "Y ellos [las autoridades] cada día aprietan más y no dan soluciones al pueblo".
Esto choca con sectores de la sociedad más preocupados por informarse y desarrollar proyectos desde el antirracismo, desde el arte, contra la homofobia, razonó. "Ya no pueden engañarlos".
En estas circunstancias, "sale lo peor del régimen, que es la represión, lo golpes, herramientas como el Decreto Ley 349, que mata el arte independiente en Cuba, el arte que piensa diferente"
A juicio del artista, "estamos en un momento en Cuba histórico, en el sentido en que es de vida o muerte".
"Si dejamos que el Estado cubano nos meta el pie, vamos a pasar 30, 40, 60 años más, ellos haciendo lo que les da la gana y nosotros teniendo que emigrar, porque en Cuba no vamos a tener vida ninguna los que pensamos diferente y los que tenemos una cultura progresista y cívica".
"Al final, ni siguiera estamos hablando de que aspiramos a tener el poder político, estamos hablando de personas que tenemos una actitud cívica", afirmó.
No obstante, "la diferencia ahora es que ya la gente está respondiendo, la gente de la calle se da cuenta de que es un descaro el sistema. Lo de ayer (sábado) fue un ejemplo", opinó.
El Decreto Ley 349 detalla "contravenciones a las regulaciones en materia de política cultural" del régimen. Entre otras disposiciones, incluye castigos contra quien autorice o permita servicios artísticos que no hayan sido "aprobados y contratados por la institución cultural a que corresponda".
Asimismo, penaliza a quien "como artista individual o actuando en representación del colectivo a que pertenece, brinde servicios artísticos sin la autorización de la entidad que corresponda", y a quien "preste servicios artísticos sin estar autorizado para ejercer labores artísticas".
Igualmente, califica como violaciones establecer "espacios de comercialización de las artes plásticas sin tener la autorización que corresponde, ni estar inscrito en el Registro del Creador de las Artes Plásticas y Aplicadas".