Representantes del exilio cubano calificaron este miércoles en Miami de "abusivas y aberrantes" las nuevas reglas migratorias de la Isla que buscan negar la ciudadanía a hijos de cubanos en el extranjero opuestos a la ideología del régimen.
"La nacionalidad de un país no puede depender de la ideología del que esté presidiéndolo el país, eso es ridículo", dijo a EFE Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia.
El disidente agregó que el nuevo código representa una "aberración y un indicativo más de cómo el régimen de Cuba discrimina a los cubanos y viola los derechos humanos, ya no solamente de los adultos sino de los niños".
Para la opositora Rosa María Payá, "es una demostración más del 'apartheid' político impuesto por el régimen dinástico de La Habana sobre todos los cubanos".
Agregó que es una prueba más de que la dictadura cubana "no se reformará a sí misma para democratizarse. "Con o sin Castros en la presidencia, el régimen seguirá tratando al pueblo no como ciudadanos soberanos sino como si fueran propiedad estatal", dijo.
En el mismo sentido se manifestó Elizardo Sánchez, líder de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, quien se encuentra en Miami.
Sánchez señaló a EFE que "emprenderla" contra familiares, incluidos niños y ancianos, de opositores" es una "practica habitual" del régimen castrista durante las casi seis décadas que lleva en el poder.
"Ahora se han atrevido a ponerlo en blanco y negro", matizó el disidente al precisar que no le "sorprende para nada".
"Cómo es posible que basado en la ideología que pueda tener en el futuro el niño, de antemano, y aún antes de nacer, ya se legisla que ese niño, ese cubano, que no va a poder hacer uso de sus ciudadanía", se lamentó Ramón Saúl Sánchez.
El líder del Movimiento Democracia afirmó que el decreto ley 352, que entró en vigencia este lunes, representa un nuevo "escándalo y un abuso" del régimen que "viola" toda clase de acuerdos internacionales.
La Cancillería de Cuba anunció en octubre pasado cambios en su política migratoria, entre ellos, eliminó "el requisito de avecindamiento", para que "los hijos de cubanos residentes en el exterior, que hayan nacido en el extranjero, puedan obtener la ciudadanía cubana y su documento de identidad".
Sin embargo, el decreto abre la posibilidad de negar la ciudadanía "cuando el interesado, el padre o madre cubanos o representantes legales de los menores de edad (...), hayan cometido hechos o realizado acciones contra los fundamentos políticos, sociales y económicos del Estado cubano".
El presidente del Movimiento Democracia recordó que a él le han negado varias veces la entrada a Cuba, pese a ser ciudadano cubano porque su "ideología es diferente a la del régimen".
Lamentó que esta vez la ley va más lejos y es "tan arrogante" que que han codificado "que un niño cubano deje de serlo en virtud de la ideología de su padre".
"Para los que tenían esperanza de cambio y reforma, como yo, después de sesenta años de dictadura, este es otro zarpazo del régimen cubano contra los derechos de los niños y de los cubanos en general", agregó.
El decreto es "un verdadero monumento a la sinceridad soez del socialismo a la cubana", indicó el escritor y bloguero Orlando Luis Pardo Lazo.
El pasado octubre el Gobierno cubano dio a conocer cuatro medidas migratorias. Además del fin del avecindamiento, aprobó la eliminación de la "habilitación" del pasaporte para los viajes a Cuba de los emigrados cubanos. La llamada "habilitación" permitía a La Habana negarle a determinados cubanos la entrada a su país.
Asimismo, La Habana autorizó la entrada y salida a Cuba de ciudadanos cubanos residentes en el exterior en embarcaciones de recreo y la entrada a la Isla de los cubanos que salieron ilegalmente del país, excepto aquellos que lo hicieron a través de la Base Naval de los Estados Unidos en Guantánamo.