El cubano Luis "King Kong" Ortiz derribó en tres ocasiones a Travis Hoffman antes de soltar una andanada de golpes en el décimo asalto (final) y obligar al árbitro Thomas Taylor a detener en el minuto 1:58 el combate celebrado en el Staples Center de Los Ángeles.
Fue la segunda victoria al hilo de Ortiz luego de un doloroso revés a comienzos de año ante el estelar de la cartelera, Deontay Wilder, pero el cubano tuvo que batallar ante un incómodo Kauffman que rehuyó continuamente la pelea, informa ESPN Deportes.
La izquierda de Ortiz, peso completo radicado en Miami, fue letal y envió en tres ocasiones a Kauffman a la lona, incluida una en el asalto de definición.
Kauffman, de 33 años, había tenido apenas tres peleas en los últimos dos años.
Con su estilo de medio lado, Ortiz lo fue acorralando en los primeros dos asaltos, conectando su sólida izquierda al rostro al cerrar el segundo giro.
Al minuto 1:15 de tercer round, Kauffman se quejó de un golpe bajo que forzó al árbitro a detener el combate para darle tiempo de recuperación. Segundos después, Ortiz volvió a golpearlo con su izquierda y, más tarde, en el quinto asalto, retó al nativo de Reading, Pennsylvania, a que peleara y dejara de dar vueltas en el ring, sin mucho resultado.
Kauffman (32-3, 23 KO) visitó la lona por primera vez a los 27 segundos del sexto asalto, cortesía de una izquierda de Ortiz, quien creyó haber terminado el combate y se subió a celebrar en una de las esquinas, antes de que el estadounidense superara el conteo.
Kauffman sobrevivió y se dedicó a huirle a la izquierda del cubano en el siguiente round.
En el octavo, Ortiz conectó otra izquierda que mandó a Kauffman nuevamente a la lona, pero el estadounidense volvió a recuperarse.
A comienzos del décimo, el cubano sacó otra izquierda demoledora que derribó a Kauffman, quien se levantó rápidamente.
Pero momentos después, Ortiz lo castigó con otra izquierda que lo lastimó, y aunque Kauffman no cayó, no pudo evitar una andanada de combinaciones de golpes con ambos puños del cubano, por lo que el árbitro decidió detener la pelea.
Ortiz, de 39 años, venía de una derrota ante la estrella de la cartelera, Deontay Wilder, con un fulminante nocaut en el décimo asalto, luego de dominar todo el combate. En el verano había sumado una victoria a su récord, ahora de 30-1, 26 KO, ante Razvan Cojanu por nocaut.
La pelea de Wilder, ante Tyson Fury, fue declarada empate, en una decisión polémica que pospone las aspiraciones de revancha de Ortiz.