Los cubanos Sullivan Barrera y Yuriorkis Gamboa salieron con la victorias el sábado del Madison Square Garden, pero de manera muy distinta, informa ESPNDeportes.
Mientras Sullivan se levantó de la lona para poner orden y vencer a un peligroso dominicano Félix Valera; Gamboa, quien también sufrió una caída, se llevó un triunfo polémico por puntos sobre el boricua Jason Sosa en duelo de excampeones.
En el evento coestelar de la velada de Main Events y Golden Boy Promotions, que transmitió HBO, Barrera y Valera ofrecieron un buen espectáculo en los semipesados, pero al final la calidad técnica del cubano (21-1, 14 KO) fue más que el poder de su adversario (15-2, 13 KO) y se llevó tarjetas de 98-88, 97-89 y 97-90, calificación que, quizá, fue la más justa de acuerdo a lo sucedido en el ring, pues al dominicano los jueces le rebajaron tres puntos por golpes bajos.
El arranque de la pelea fue espectacular. Valera sacó un potente puño derecho que envió la lona al cubano, señalado como favorito. Pero Barrera se repuso pronto en busca de emparejar las acciones y, en el mismo primer capítulo, con una derecha, también logró enviar a su enemigo a la lona.
En el segundo round, Valera logró conectar fuerte arriba para romperle el párpado izquierdo al cubano, quien no obstante continuó atacando todo el combate para ser mejor que su adversario.
En la otra pelea a 10 rounds, en peso ligero, Yuriorkis Gamboa se impuso al puertorriqueño Jason Sosa por decisión dividida
Las calificaciones de los jueces fueron 94-94, 96-92 y 95-93 a favor del cubano, quien con todo y la polémica tras visitar la lona en el séptimo episodio y recibir un punto menos en el décimo, logró mejorar su marca a 28-2 con 17 nocauts para conseguir su segunda victoria en fila.
Sosa sufrió su segunda derrota en fila tras caer en la previa con Vasyl Lomachenko, para estancarse en 20-3-4 y 15KO.
En las acciones, Gamboa falló algunos de sus mejores impactos y solo mostró destellos del talento que lo llevó a conquistar cetros en los pesos pluma, superpluma y ligero.
El cubano aceptó la pelea con solo tres semanas de anticipación e incluso cambió de entrenador recientemente.
Sosa, por su parte, trató de estar siempre a la ofensiva, pero pagó el precio de no ser lo efectivo que había sido en otras ocasiones, además de que, con la experiencia de Gamboa, principalmente con amarres, dejó ir sus mejores momentos.