El joven gay cubano José Enrique Morales Besada, residente en Morón, Ciego de Ávila, pidió a Mariela Castro Espín, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) justicia ante una brutal agresión que sufrió y cuyos perpetradores solo han recibido 2.000 pesos de multa.
"Yo no sé si Mariela Castro de verdad está enterada, pero lo que me pasó me parece que se ha hecho bastante público y lo único que le pido a ella y a todo el que le pueda interesar es que se preocupen un poquito más por lo que está pasando aquí en Morón", dijo en un vídeo publicado el domingo en su perfil de Facebook.
Morales Besada, de 21 años, hizo circular un mensaje en el que acusa a las autoridades de su pueblo de "discriminación, negligencia, manipulación de documentos" y "corrupción".
En su más reciente vídeo, el joven calificó la situación allí de "preocupante".
"Son muchos los crímenes, los asesinatos que han ocurrido a homosexuales y esto tiene que parar. No solamente hablo por mí, hablo por toda la gente que ha sido víctima de una forma u otra de discriminación, de violencia, de homofobia", denunció.
"Dejémonos de mediocridad y de tanta ignorancia que nos está comiendo por una pata, preocupémonos por salir adelante", señaló.
"Úsenme como ejemplo, me estoy brindando a eso, por eso hago público que lo me está pasando. No busco otra cosa, más que ayudar a mi comunidad, en especial a la que está aquí", reivindicó
En un anterior audiovisual, también compartido en la misma red social, Morales Besada dijo sentirse "bastante indignado, impotente, herido en muchos sentidos, no solo por todos los acontecimientos que han pasado últimamente" en su vida.
Insistió en que sus agresores se encuentran "absueltos de todo delito, cuando anteriormente de hacer lo que hicieron" con él, "le fracturaron el cráneo a un muchacho… (que) se vio entre la vida y la muerte".
"Tengo pruebas y testigos de lo que estoy hablando, no tengo miedo, porque creo que con la verdad la justicia está de mi lado", añadió.
Ante lo que parece un mensaje de respuesta a una persona que comentó en anteriores de sus denuncias, Morales Beseda dice ser "revolucionario", pero "no comunista", también ataca al presidente Donald Trump y lamenta estar "esperando una reunificación familiar".
"No tengo nada personal en contra de las autoridades, ni del Gobierno de Cuba, al final lo que se deja hacer un pueblo no es culpa de los dirigentes(…) Tengo fe en que voy a ser escuchado", declaró.
"Solamente les quiero pedir que difundan todo lo que me a mí me ha pasado, no he puesto ni más ni menos. No tengo la necesidad de inflar un dolor o una lesión (…) tengo pruebas de todo lo que hablo", sostuvo.
"Háganlo saber, lo que se está cometiendo conmigo aquí es una injusticia, es un atropello, esto es una falta de respeto, un insulto a la sociedad, a la comunidad gay repartida en el mundo", reclamó.