Estados Unidos celebra este viernes cien años del primer vuelo entre Cayo Hueso (Florida) y La Habana, un hito de la aeronáutica que convirtió a Cuba en el primer destino internacional de la aviación estadounidense, reporta EFE.
Fue el 17 de mayo de 1913 cuando el cubano Domingo Rosillo del Toro pilotó su monoplano desde Cayo Hueso hasta la capital cubana y se aseguró, de esta manera, un premio de 10.000 dólares por ser el primero en cruzar por aire el Estrecho de Florida.
Esa hazaña de la aeronáutica con la que dio inicio la historia de la aviación entre ambos países se produjo tan solo diez años después de que los hermanos Wright realizaran en 1903 el primer vuelo de la historia de la aviación, y cinco desde que Louis Blériot cruzara por primera vez, en 1908 y con un monoplano, el Canal de la Mancha.
A sus 34 años, Rosillo recorrió en dos horas y ocho minutos en su monoplano Morane-Saulnier los casi 145 kilómetros que separan Cayo Hueso y la Isla.
Así, estableció un récord mundial tanto de distancia recorrida en avión sobre el mar como de altitud alcanzada. Para festejarlo, Cuba recibió al piloto, de origen español, con un cañonazo disparado desde la fortaleza de El Morro y una gran multitud le atendió como a un héroe.
El aeroplano, con la cabina abierta, pesaba menos de 500 kilos y como sistema de navegación contaba tan solo con una brújula, sin ningún tipo de protección en caso de que el piloto se viera obligado a descender sobre las aguas del Estrecho de Florida.
Rosillo (1878-1957) llevaba en su chaqueta algunas cartas que el alcalde de Cayo Hueso le había entregado, lo que ha hecho que el vuelo también esté considerado como el primero de la historia de la aviación comercial entre las dos naciones.
Aquella proeza aérea, conocida como "el vuelo de los audaces" por el peligro que entrañó, será homenajeada este fin de semana en una exposición sobre "el nacimiento de la aviación comercial en Cuba", organizada por el Instituto San Carlos de Cayo Hueso.
La muestra incluirá sellos, fotos y postales relacionadas con el hecho.
Aeropuerto Internacional de Miami honrará la semana próxima al aviador, graduado el 22 de octubre de 1912 en la Escuela de Aeronáutica de París, con la instalación de una placa conmemorativa, junto a las de otros destacados pilotos de la historia.
Domingo Rosillo, que murió en Cuba en noviembre de 1957, fue el primer cubano en obtener una licencia de piloto por la Federación Aeronáutica Internacional (1912) y recibió el grado de capitán en las Fuerzas Armadas Cubanas.
En 1916 viajó a España donde se convirtió en instructor de vuelo y luego decano de la Escuela de Aviación de Barcelona. En 1937 volvió a Cuba, donde recibió todo tipo de condecoraciones.
Unos años después de aquel histórico vuelo de Rosillo, Juan Terry Trippe recibió el encargo de suministrar un servicio postal regular entre Estados Unidos y Cuba.
Para ello creó la desaparecida Pan American Airways (Pan Am), que se mantuvo durante décadas como la mayor aerolínea estadounidense y marcó decisivamente el desarrollo del incipiente sector del transporte aéreo de pasajeros en todo el mundo.
El 28 de octubre de 1927 realizó el primero vuelo internacional programado por una aerolínea estadounidense: se trataba de un Fokker trimotor cargado de sacas de correo que partió de Cayo Hueso y aterrizó una hora y diez minutos más tarde en La Habana.
Unos tres meses después la aerolínea inauguró el primer servicio estadounidense de vuelo regular diario de pasajeros entre ambos destinos, un traslado que inicialmente hacía en un Fokker F-7 con espacio para siete viajeros.