'Descubrir la manera en que Andrés Conde recuerda su muerte es entender que estamos en presencia de uno de esos extraños paisajes donde finalmente avistamos al Poeta. Andrés Conde no escribe. Andrés Conde acontece.'
'Allí a lo lejos, más allá del río y del mar, de Francia/ y Alemania, queda Polonia. Arrinconada como una isla/ al extremo del mundo, a punto/ de caerse del planeta. Allá lejos queda el hambre'
'A mi espalda estaba Chicago,/ la ciudad donde más colillas de cigarros se aplastan./ Tal vez por eso decida mudarme a Chicago/ y porque cada baldosa tiene su desesperado.'
'el fiñe gamer tiene los/ ojos verdes como/ dos limones recién cortados/ la pupila de la mantis/ el cabello, un trigal/ un corazón solitario e impuro/ propulsado por electrodos/ y una furia innata como la/ tiniebla'
'Yerra a peróxido y rubia termina por devastar consigna/ como añicos contra lóbulo definitivo [aplicable tanto a/ pernos y similares como a suculentas, oh]...'
'Alamar: barrio periférico al este de La Habana, edificio con/ reja sobre un terreno duro donde los árboles crecen al revés/ y la familia visita a sus muertos en la costa.'