El presidente de Colombia, Iván Duque, definió el actual éxodo de venezolanos como "la crisis migratoria y humanitaria más indignante de la historia reciente de América Latina" y pidió más determinación ante "la dictadura" en Venezuela bajo el Gobierno de Nicolás Maduro.
En su intervención ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York, Duque consideró un "reto para Colombia la situación que enfrentan los hermanos venezolanos que están huyendo de una dictadura, muchos de ellos niños inocentes desprotegidos y expuestos a la tragedia del destierro".
Recordó que su país "en menos de dos años ha abierto las puertas a casi un 1.000.000 de hermanos venezolanos", a quienes han recibido con afecto a pesar de cualquier dificultad desde el punto de vista social y fiscal.
"Nos une la fraternidad, pero no podemos dejar de llamar las cosas por su nombre. Estamos viviendo la crisis migratoria y humanitaria más indignante de la historia reciente de la región por cuenta de una dictadura que aniquiló la libertad", condenó.
Para el presidente colombiano, "la libre determinación de los pueblos no puede ser manipulada para convertirse en la libre determinación de los opresores del mundo" y llamó a las Naciones Unidas a unirse por el "fin de la dictadura, el retorno a la democracia y la plena libertad".
Llamó a la comunidad internacional a "pedir de inmediato la libertad de los presos políticos" en Venezuela y hallar "las mejores soluciones a esta crisis".
Agradeció también a todos los países que acompañaron a Colombia en la reunión de alto nivel convocada por su Gobierno, "donde quedó claro el compromiso regional para abordar esta crisis humanitaria".
Reiteró la necesidad de la creación de "un fondo multilateral para atender a la población migrante víctima de esta dictadura".
El mandatario colombiano recordó el proceso actualmente en curso ante la Corte Penal Internacional para denunciar, investigar y tomar medidas contra "quienes han sembrado esta tragedia" en Venezuela.